Las 8 claves si te quieres comprar un eléctrico

Peugeot ha creado una guía para ayudar a las personas que están barajando la posibilidad de comprarse un eléctrico o, en su defecto, un híbrido enchufable.

Hace tiempo os trajimos todos los modelos electrificados que Peugeot tiene disponibles en 2020. Además, os dijimos que a lo largo del año aumentaría la gama y os desvelamos los precios de todos estos modelos ECO y 0 de la firma del león. Ahora, tiempo después, toca hablar del proceso previo a hacerse con uno de ellos. Venimos a solucionar las dudas de todos aquellos que todavía no saben exactamente cómo funcionan estos coches o qué significan esas siglas tan raras que os ponemos. EV, HEV, PHEV…

1. Concienciación medioambiental

Una de las premisas más importantes a la hora de hacerse con un coche eléctrico es que cuenta con una etiqueta que nos permite circular por cualquier escenario de contaminación. Para Peugeot, lo ideal sería pensar que si tenemos un coche eléctrico o electrificado, es porque estamos concienciados con la movilidad sostenible y somos responsables de lo que le sucede al planeta. En cualquier caso y dando datos, un eléctrico emite entre un 30 y un 70% menos de C02 en su ciclo total de vida.

Esto supone que el simple hecho de hacernos con uno, valga para alargar la vida del planeta. Y, además, nos beneficiará en innumerables restricciones cuando haya duras normativas en las grandes ciudades. Pero el objetivo es priorizar la compra de estos coches por la concienciación medioambiental y no por el interés.

2. ¿Tiene ventajas un eléctrico?

Si la respuesta fuese no, este artículo no tendría sentido. Las ventajas de los eléctricos son muchas. Por citar alguna y seguir el hilo de la primera recomendación, los beneficios de los eléctricos son principalmente los de sus ultrabajas emisiones y el acceso a núcleos urbanos en protocolos de contaminación. También, se podrá aparcar en zonas de estacionamiento regulado sin pagar y acceder a carriles de alta ocupación como el BUS-VAO en Madrid.

3. ¿Hay sitios para cargarlos?

Puede ser una de las preguntas más importantes. Dónde lo recargo. Partimos de la base de que en España hay cada vez más puntos de carga repartidos por las ciudades pero siguen siendo pocas para todos los nuevos modelos que las marcas están sacando durante estos dos últimos años.

Lo ideal es tener una plaza de garaje donde instalar un cargador y seguir el proceso de carga habitual en la toma doméstica. Por ley, se puede instalar un punto de recarga para coche eléctrico en una plaza de garaje privada siempre y cuando se comunique previamente a la comunidad. Y, una vez realizada la instalación, el proceso de carga es exactamente el mismo que realizamos, por ejemplo, con nuestro móvil por las noches.

4. La utilización de un eléctrico es muy fácil

Partimos de la base de que la utilización de un coche eléctrico, pese a tener sus particularidades, es la misma que la de un coche convencional. La única diferencia, es que en lugar de tener un contador de gasolina que repostar, tenemos una batería que recargar. Esta batería, tendrá una capacidad máxima que nos indicará cuántos km podemos recorrer hasta que llegue al 0%.

Los modelos 100% EV de Peugeot, los e-208 y e-2008, ofrecen autonomías de 340 y 320 km respectivamente. Con las baterías llenas, se le podrá dar un uso casi semanal incluso sin necesidad de recargarlo. En cualquier caso, si cada día cuando lleguemos a casa lo enchufamos, siempre tendremos la batería al 100% para la mañana siguiente.

5. Viajes largos…

Posiblemente esta sea una de las pocas cosas negativas que un coche eléctrico sigue teniendo a día de hoy. Partiendo de los 340 km de autonomía de un e-208, está claro que para realizar un viaje largo habrá que programar mínimo, una parada. Pero los eléctricos, al contrario que los de combustión, gastan más batería por carretera por lo que posiblemente tuvieran que ser dos paradas en lugar de una.

El segundo problema llega cuando, como decíamos al principio, la red de puntos de carga en las carreteras españolas no está todavía a la altura de las circunstancias. Posiblemente, para llegar de un punto A a un punto B, tengamos que desviarnos si queremos optar por una estación de carga rápida. Si tenemos la suerte de tener una de camino, en unos 30 minutos habremos cargado el 80% de la batería. De no ser así, igual tendremos que hacer descansos de varias horas…

6. ¿Y el precio?

“Un eléctrico es mucho más caro que uno normal”. Esta frase ha perseguido y persigue día tras día a los coches electrificados. Pero esperamos que no lo haga en el futuro. Tanto porque la gente sepa cómo es realmente el precio de un eléctrico como porque los precios de salida de los mismos bajen considerablemente.

Es indudable que un eléctrico es caro, sobre todo a la hora de comprarlo. Pero donde el modelo EV es realmente económico, es en el día a día. Con el paso del tiempo y los km recorridos, el ahorro con un coche eléctrico no tiene parangón. El principal problema actual es que los precios de venta al público, para versiones similares entre un gasolina o diésel y un eléctrico, es demasiado dispar. Peugeot es una de las marcas que está trabajando ya en esta separación de precios.

7. Por la seguridad no hay problema

Las baterías y los sistemas eléctricos de estos coches son de última generación y están completamente aislados. Estos modelos cuentan con las últimas ayudas a la conducción y ofrecen la misma seguridad que sus alternativas diésel o gasolina. El hecho de ser eléctricos no les priva de equipar los asistentes a la conducción como crucero adaptativo, frenada automática de emergencia o asistente de parking entre otros. De hecho, los modelos Peugeot eléctricos e híbridos enchufables han pasado las mismas pruebas EuroNCAP, y con el mismo éxito, que las versiones convencionales.

8. ¿Qué merece más la pena, EV o PHEV?

La respuesta a esta pregunta es: “depende 100% del uso que le vayas a dar”. Un eléctrico se orienta más a un uso urbano, donde la batería no sufra mucho y consigamos la autonomía prometida por el fabricante. Además, la comodidad que da un eléctrico en cuanto a mantenimiento, no la tienen otros coches.

Pero claro, si tu trabajo está a muchos km de casa o te gusta escaparte los fines de semana con la familia, la mejor alternativa es un PHEV. Porque tienes unos 50 km (Depende el coche) de autonomía eléctrica para el uso diario, y un tanque de gasolina suficiente para los viajes largos que te dará la tranquilidad de no tener que desviarte a buscar una estación de carga.