Ya no será necesario achatarrar un coche para conseguir ayudas a la compra de un eléctrico

Con la coyuntura económica, laboral y social presente, marcada por la epidemia de Covid-19 que bloque la casi práctica totalidad de la normalidad, la reactivación de los diferentes sectores industriales además de la economía familiar pasa por un plan de ayudas que orienten las subvenciones a quienes más afectados se han visto durante el confinamiento establecido por el estado de alarma.

De esta manera, el ejecutivo encabezado por Pedro Sánchez y, a través del Plan Moves, gestionado por el Idae, Instituto energético dependiente de Transición Ecológica, Entidad Pública Empresarial del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, el achatarramiento de un vehículo con motor térmico para la consecución de ayudas a la compra de uno eléctrico será opcional.

Mandar el coche al desguace supondrá más ayudas

Así, a través de la secretaria de Estado de Energía, Sara Aagesen, se ha anunciado que las ayudas oscilarán entre los 4.000 y los 5.500 euros, según el destino del vehículo entregado en el proceso de compra de un vehículo eléctrico 100 por 100 de nueva matriculación.

La pandemia que sufrimos con dureza en todos los niveles no ha modificado los planes y previsiones del gobierno que mantiene la marca de lograr matricular en nuestro país hasta 5 millones de vehículos eléctricos en el año 2030, tal y como ya recogía Plan Nacional Integrado de Energía y Clima.

De hecho, Aagesen ha manifestado que cuentan y mantienen su apoyo y apuesta por la nueva era de la industria de la automoción eléctrica como parte fundamental para con el plan de recuperación que la epidemia provocada por el nuevo coronavirus ha supuesto para la economía española, europea y mundial.

También ha señalado que, a pesar de que el precio del barril de petróleo se desploma y su reflejo en el precio de los carburantes fósiles podría avivar tanto el interés por los vehículos animados por combustibles como la gasolina o el gasóleo o, es más, por la compra de un coche de segunda mano con motor de combustión, hay que tener en cuenta que, el repunte que previsiblemente tengan los hidrocarburos, una vez se estabilice la situación, podría generar un riesgo e impacto para quien recurriera a mecánicas más tradicionales.