Adiós a la meta de 2°C: El cambio climático está fuera de control, advierte un experto

Alberto Noriega     13 febrero 2025     5 min.
Adiós a la meta de 2°C: El cambio climático está fuera de control, advierte un experto

El límite de 2°C de calentamiento global es “imposible de alcanzar”, advierte un estudio liderado por James Hansen. La crisis climática avanza más rápido de lo previsto, con impactos potencialmente devastadores.

El planeta se calienta a un ritmo mucho más rápido de lo que se había proyectado y el límite de 2°C fijado por el Acuerdo de París ya no es alcanzable, según un nuevo estudio liderado por el renombrado climatólogo James Hansen. La investigación, publicada en Environment: Science and Policy for Sustainable Development, sostiene que la reducción de la contaminación por azufre en el transporte marítimo ha acelerado el calentamiento global más de lo previsto, en combinación con la continua quema de combustibles fósiles. Si no se toman medidas drásticas, el umbral de los 2°C se superará en 2045, lo que provocaría fenómenos climáticos extremos aún más devastadores. Sin embargo, otros científicos han señalado que los cálculos del estudio pueden estar sobreestimando el impacto del calentamiento.

El impacto de la contaminación y el efecto dominó del calentamiento

El equipo de Hansen, en la Universidad de Columbia, sostiene que la eliminación de aerosoles contaminantes provenientes del transporte marítimo, que antes bloqueaban parcialmente la radiación solar, ha sido un factor clave en el aumento de las temperaturas. El calentamiento adicional provocado por la reducción de estas emisiones podría ser hasta cinco veces mayor de lo estimado en estudios previos. Esta afirmación coloca el nuevo análisis en el extremo más alarmante del espectro de proyecciones científicas sobre el cambio climático.

La principal preocupación es que este calentamiento acelerado podría acelerar la llegada de puntos de inflexión climáticos irreversibles, como el colapso de las corrientes oceánicas del Atlántico (AMOC), el derretimiento masivo del Ártico y la elevación del nivel del mar en varios metros. Según el estudio, si no se toman medidas urgentes, el AMOC podría colapsar en los próximos 20 o 30 años, lo que alteraría drásticamente los patrones climáticos del planeta y haría que el calentamiento fuera aún más extremo.

Discrepancias científicas y modelos en disputa

Si bien el estudio de Hansen es una advertencia contundente, no todos los científicos están de acuerdo con sus conclusiones. El doctor Zeke Hausfather, climatólogo independiente, calificó el estudio como “una contribución útil”, pero advirtió que se encuentra en el extremo más alto de las estimaciones actuales. El informe del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC), basado en modelos computacionales, establece que la sensibilidad climática al CO₂ se sitúa entre 2.5°C y 4°C por cada duplicación de las emisiones. Hansen y su equipo, en cambio, estiman que esta sensibilidad es de 4.5°C, lo que explicaría su proyección más alarmante.

Otros expertos también han señalado que el método empleado por el equipo de Hansen para evaluar el impacto de la reducción de contaminantes marítimos puede ser demasiado simplificado. El director del Instituto Goddard de Estudios Espaciales de la NASA, Gavin Schmidt, comentó que el análisis no tiene en cuenta otras variables, como los cambios en las emisiones de China y la variabilidad interna del clima.

Pexels Victormoragriega 30117412

Récords de temperatura y el factor sorpresa del calentamiento

Los datos recientes respaldan la idea de que el calentamiento global está en un punto crítico. Enero de 2025 se convirtió en el mes de enero más caluroso jamás registrado, desafiando las expectativas de que el enfriamiento de La Niña reduciría las temperaturas globales. Este incremento inesperado sugiere que el planeta está atrapado en un bucle de calentamiento más fuerte de lo previsto.

Además, el estudio de Hansen destaca cómo la crisis climática ya está “supercargando” eventos meteorológicos extremos en todo el mundo. Con solo 1.3°C de calentamiento promedio en los últimos años, los desastres naturales han devastado comunidades enteras, lo que sugiere que superar los 2°C traería consecuencias catastróficas.

¿Hay una solución? Medidas drásticas y geoingeniería

Frente a este panorama desalentador, Hansen propone un conjunto de acciones radicales para frenar el calentamiento global. El científico aboga por la implementación de un impuesto global sobre el carbono, donde los combustibles fósiles sean gravados y los ingresos sean redistribuidos a la población.

Asimismo, Hansen respalda la rápida expansión de la energía nuclear como una alternativa para reducir la dependencia de los combustibles fósiles. Pero su propuesta más polémica es la investigación en geoingeniería solar, que implicaría bloquear parte de la radiación solar para enfriar artificialmente el planeta.

Aunque aclara que no recomienda la implementación inmediata de estas técnicas, insiste en que las generaciones futuras deben conocer su potencial y sus riesgos. “No podemos prohibir a los jóvenes explorar soluciones para evitar la catástrofe climática,” concluye Hansen.

3000

El desafío político y la resistencia de los intereses económicos

El estudio no solo aborda el problema científico, sino también la falta de acción política efectiva. Hansen critica duramente la influencia de intereses privados en las políticas climáticas y asegura que en las democracias el poder debería estar en manos de los ciudadanos, no de las corporaciones.

“El problema fundamental es que los residuos de los combustibles fósiles siguen siendo arrojados a la atmósfera sin costo alguno”, sentencia el científico. Según él, la solución pasa por corregir este fallo del mercado y generar un sistema económico que haga pagar el verdadero precio del carbono.

Un futuro más caliente y con riesgos crecientes

Aunque la comunidad científica sigue debatiendo sobre la precisión de las predicciones de Hansen, su mensaje es claro: el mundo se está calentando más rápido de lo previsto y el margen de maniobra para frenar el cambio climático se está cerrando.

Si la humanidad no toma medidas drásticas en la próxima década, el calentamiento global podría superar los 2°C mucho antes de lo esperado, desencadenando cambios irreversibles en el sistema climático del planeta.

Con el destino climático de la Tierra en juego, la pregunta ya no es si el cambio climático es real, sino si la humanidad tiene la voluntad política y tecnológica para detenerlo antes de que sea demasiado tarde.

Comentarios cerrados