Ámsterdam estrena un gran parking subterraneo solo para bicicletas

Si alguna vez has estado en Ámsterdam seguro que te ha llamado la atención el gran número de bicicletas que se acumulan a la entrada de la Estación Central de esta ciudad neerlandesa. Son muchos los que allí se desplazan a trabajar en tren, y para ir a la estación no utilizan un coche como sería lo habitual en otros países, sino que van en bicicleta.

La popularidad de las bicicletas eléctricas durante los últimos años ha incrementado todavía más el uso de este medio de transporte de dos ruedas, provocando que la situación a las puertas de la Estación Central de Ámsterdam fuera ya totalmente insostenible e hiciera falta una solución urgente.

Algo así solo lo verás en Ámsterdam

El Ayuntamiento de la ciudad inició así un megaproyecto para hacer posible que todos los ciudadanos que lo deseasen pudieran acudir a la Estación Central en bicicleta. El resultado de este megaproyecto se ha podido ver estos días tras su inauguración.

Los habitantes de la ciudad pueden disfrutar desde ahora de uno de los mayores parkings subterraneos de acceso exclusivo para bicicletas de toda Europa, con nada más y nada menos que siete mil plazas. Las peculiaridades de este parking no acaban aquí, sin embargo, ya que ha sido construido nueve metros por debajo de la superficie y actualmente se encuentra cubierto por el agua.

Este nuevo parking subterraneo ha sido inaugurado por la Ministra de Medioambiente de los Países Bajos, Vivianne Heijnen, y todo apunta a que ésta no va a ser probablemente la única inauguración a la que asista. El Ayuntamiento de Ámsterdam lleva ya trabajando algún tiempo en otro proyecto similar, en este caso con capacidad para cuatro mil bicicletas, que debería abrir sus puertas en marzo de este mismo año, si todo va según lo previsto.

Si quieres conocer con más detalle el funcionamiento del nuevo parking subterraneo de la Estación Central de Ámsterdam te recomendamos que eches un vistazo al vídeo que encontrarás a continuación. Resulta realmente sorprendente, especialmente para todos aquellos que vivimos en países en los que el uso de la bicicleta es, por el momento, minoritario.