China trabaja a pleno rendimiento para fabricar buques Porta-Vehículos tras una demanda de coches sin precedentes

Con el auge de las exportaciones de vehículos, los astilleros chinos están acelerando la construcción de buques ro-ro, adaptándose a las crecientes preocupaciones medioambientales y al cambio hacia la sostenibilidad en la industria naval. En 2023, China alcanzó un récord en la exportación de vehículos, con 4.91 millones de unidades, un aumento del 58% con respecto al año anterior, lo que probablemente convirtió a China en el mayor exportador de automóviles del mundo ese año, lo que ha llevado a los astilleros a responder a esta creciente demanda.

Una demanda sin precedentes y en aumento

Para satisfacer esta creciente demanda, los astilleros chinos como Jinling Chuanbo, bajo China Merchants Industry Holdings Co, están trabajando a toda máquina. Jinling Chuanbo, en particular, tiene un retraso en los pedidos hasta 2027. Los nuevos buques ro-ro, que incluyen aquellos capaces de transportar entre 7,000 y 8,600 vehículos, están siendo construidos con un enfoque en la sostenibilidad, utilizando combustibles bajos en carbono como el gas natural licuado (GNL).

Para manejar el aumento en la exportación de vehículos, el puerto de Taicang en la provincia de Jiangsu está manejando entre 7,000 y 8,000 vehículos por mes, con un aumento significativo a casi 30,000 en diciembre. Este puerto está invirtiendo más de 2 mil millones de yuanes para construir el muelle ro-ro para automóviles más grande a lo largo del río Yangtze, con una capacidad anual de envío de 1.3 millones de unidades.

Eddie Zhang, director operativo de COSCO Shipping Car Carriers, ha informado que su compañía ha encargado 24 buques ro-ro, que se espera entren en servicio en la segunda mitad de 2024. Estos buques, que pueden transportar entre 7,000 y 8,600 vehículos cada uno, funcionarán con gas natural licuado de bajas emisiones. Se espera que la flota de la compañía alcance aproximadamente 30 buques ro-ro, capaces de enviar 700,000 automóviles al extranjero anualmente después de que estos nuevos buques se unan a la flota.

Para hacer frente a la brecha entre la demanda inmediata y el tiempo necesario para construir nuevos buques, que es de casi 15 meses, los astilleros están aprovechando la digitalización, la innovación tecnológica y la capacidad existente. Actualmente, casi el 60% de los vehículos se envían al extranjero utilizando un sistema llamado «open car racking», que permite a los buques de carga a granel transportar vehículos.

El Consejo de Estado de China, en un plan destinado a impulsar el comercio exterior, ha alentado a los fabricantes de automóviles y a las compañías navieras a conectarse y cooperar mejor mediante la firma de contratos de transporte a largo plazo. Para acelerar las exportaciones de automóviles, el principal fabricante chino de automóviles eléctricos BYD Co ha fletado buques de carga, y el primero de estos buques ya ha zarpado hacia Europa.

El futuro verde de la industria naval china

La industria naval china no solo se está adaptando para satisfacer la creciente demanda de buques ro-ro eficientes para el transporte de vehículos, sino que también está adoptando una visión más amplia de sostenibilidad y tecnología verde. Con la rápida expansión de las exportaciones de vehículos, incluyendo un notable aumento en la exportación de vehículos de nueva energía (NEV), los astilleros chinos están enfocando su capacidad tecnológica avanzada y su producción eficiente no solo en buques ro-ro, sino también en otros productos de alta calidad como portadores de gas natural licuado (GNL) y grandes buques portacontenedores.

Esta transición a prácticas más sostenibles se alinea con la estrategia del gobierno chino para dominar el mercado de la construcción naval verde, con planes para asegurar más del 50% de este mercado para 2025. La estrategia incluye el desarrollo de buques impulsados por metanol y amoníaco, así como la investigación en portadores de hidrógeno líquido y células de combustible, además de un sistema integral de gestión de la cadena de suministro verde para el sector.

En 2022, los astilleros chinos, liderados por empresas como Hudong-Zhonghua Shipbuilding Group Co y Dalian Shipbuilding Industry Co, recibieron un récord de pedidos para grandes portadores de GNL, destacando su capacidad para entregar productos de alta gama y tecnológicamente avanzados. Además, la industria naval china ha tomado la iniciativa en la construcción de buques más grandes y más eficientes, como el primer buque portacontenedores del mundo con la mayor capacidad de contenedores construido hasta la fecha.

A medida que el mundo se esfuerza por reducir las emisiones en las próximas décadas, China busca consolidarse como un líder mundial en la producción de paneles solares, baterías y vehículos eléctricos, así como en la construcción naval verde. Este enfoque no solo refleja una respuesta a la demanda del mercado global, sino también un compromiso estratégico con la sostenibilidad y la innovación tecnológica en un sector clave para la economía y el comercio mundial.

Sin embargo, la creciente dependencia de los astilleros chinos y la fusión de actividades comerciales y militares en estos centros han generado preocupaciones en algunos países occidentales, que buscan reducir su dependencia de la manufactura china en un contexto de tensiones geopolíticas y comerciales crecientes. Países como Alemania y Estados Unidos están tomando medidas para fortalecer sus propias industrias navieras y evitar una dependencia excesiva de China.

A pesar de estos desafíos, la industria naval china sigue siendo un actor dominante en la construcción de buques a nivel mundial, y su enfoque en la sostenibilidad y la innovación tecnológica probablemente continuará desempeñando un papel clave en la configuración del futuro de la industria naval global.