Citroën cree que el logo de Polestar se parece demasiado al suyo

Los comienzos de Polestar en el sector del automóvil, como fabricante en exclusiva de vehículos eléctricos, están siendo algo más complicados de lo que la firma sueca probablemente imaginaba.

Como ya contamos en una entrada anterior, a principios de este mes de octubre el fabricante sueco se vio obligado a llamar a revisión todas las unidades del Polestar 2 que ya había entregado, después de que algunos nuevos propietarios se quedaran tirados a un lado de la carretera.

Pero los problemas para Polestar no acaban aquí. La firma ha decidido retirarse temporalmente del mercado francés después de que Citroën la demandase en ese país porque, supuestamente, su logo de marca se parece demasiado al doble chevrón del fabricante francés.

Citroën inició una batalla judicial en Francia por este motivo en julio de 2019, y después de algo más de un año, el veredicto dictado por el tribunal prohíbe a Polestar utilizar su logo en territorio francés al menos durante los próximos seis meses. Así mismo, la firma sueca tendrá que pagar a Citroën 150 mil euros como reparación de los daños causados -sí, ya sé que parece algo surrealista, pero es lo que hay-.

Tras conocerse el fallo del tribunal, Polestar ha tomado medidas, empezando por inhabilitar su web dentro del territorio francés. Los ciudadanos franceses que traten a partir de ahora de acceder al sitio se encontrarán un mensaje indicándoles que, por decisión judicial, no es actualmente posible. Mostrándose también un número de teléfono donde pueden llamar en caso de necesitar asistencia.

Los problemas de Polestar con su logo podrían incluso ir a peor

El siguiente capítulo de este culebrón podría producirse en caso de que Citroën decida llevar esta denuncia a los tribunales europeos, con la intención de impedir que Polestar utilice su logo, no solo en Francia, sino en toda la Unión Europea. Si se diese este caso, entonces la situación se complicaría muchísimo más para la firma sueca.

La decisión del tribunal francés es, no obstante, algo controvertida; ya que aunque considera que la similitud del logo de Polestar con el de Citroën es bastante vaga, sí cree que puede llegar a dañar la reputación de la firma francesa. Es éste realmente el motivo por el que Polestar se verá obligada a pagar 150 mil euros en concepto de reparación de daños, además de no poder utilizar su logo durante los próximos seis meses en Francia.

Veremos como acaba todo finalmente, pero no debería extrañarnos si Polestar acaba modificando su imagen de marca en un futuro no muy lejano.