Claves para recargar un coche eléctrico

Peugeot ofrece su guía personal sobre todo lo que debemos saber para recargar nuestro coche eléctrico o híbrido enchufable. Dónde, cuándo, cómo…

En un coche electrificado, ya sea PHEV o 100% EV, uno de los aspectos fundamentales es su recarga. Por ello, Peugeot ha querido realizar una guía con los mejores consejos para el mantenimiento de un coche eléctrico y los principales datos que debemos conocer.

Peugeot cuenta con su App MyPeugeot que permite revisar a distancia el estado de la carga disponible del vehículo (si lo hemos dejado cargando) o los puntos de recarga más cercanos cuando vamos circulando por carretera. El objetivo de la firma francesa es acercar al cliente al coche eléctrico. Estas son las 6 claves más destacadas.

• Recarga doméstica

Una de las premisas principales para la compra de un coche eléctrico es que tengamos un lugar donde instalar un punto de recarga propio. Tanto en una vivienda unifamiliar como en una comunitaria, la Ley permite instalar un punto de recarga. Por tanto, este será el primer paso y el fundamental cuando optemos por la adquisición del mismo.

Una vez entendido que debemos tener esa toma de carga, hay que ver cuál queremos instalar. La primera sería la estándar con una potencia de apenas 1,8 kW en el que, por ejemplo, un e-208 o e-2008 tardarían una noche entera para cargar el 30% de su batería. En el caso de un PHEV, el 100% se cargaría en unas 7 horas. La carga acelerada, con una toma reforzada, recarga más del 60% en una noche para los modelos eléctricos de Peugeot. Esta potencia sería la de 3,2 kW.

Y por último, estaría la carga rápida. Tener 7,4  kW de potencia disponible en casa no suele ser lo habitual, pero se pueden contratar si queremos que nuestro coche eléctrico o PHEV cargue lo más rápido posible. Así, los eléctricos estarían cargados al 100% en unas 8 horas y el híbrido-enchufable en menos de dos horas.

• Recarga pública

Con la aplicación que antes comentábamos, Peugeot permite que conozcamos cuáles son los puntos de carga más cercanos a nuestra casa, trabajo o posición actual si estamos realizando un viaje más largo. De momento en España, la infraestructura de estaciones de carga públicas sigue por debajo de la media europea y por debajo del ritmo de ventas de coches eléctricos.

Aun así cada vez son más los disponibles y las potencias son claramente superiores a las que tendremos contratadas en casa. Con el fin de no dañar la batería, las estaciones públicas solo recargan el coche hasta el 80%. Si la toma es de 22 kW, los e-208 y e-2008 recargan su batería en dos horas. Si la toma es de 100 kW, en solo media hora lo tendremos listo.

• Autonomía disponible tras estas recargas

No hay que ser un erudito para saber que recargar un coche requiere muchísimo más tiempo que repostar un coche de gasolina, diésel o gas. Por tanto, hay que valorar qué beneficios tiene esta larga espera. La respuesta es la frecuencia con la que debemos recargarlos.

Un coche eléctrico no es principalmente para realizar largos viajes sino para tener un uso urbano. De casa al trabajo y viceversa. Por tanto, los más de 300 km de autonomía que ofrecen los eléctricos de Peugeot suponen más que suficiente para movernos durante toda la semana sin necesidad de buscar desesperadamente un punto de recarga.

Pero en cualquier caso, y esta es la principal ventaja, siempre que aparquemos al llegar a casa, el coche se podrá quedar cargando y reponer ese porcentaje gastado durante el día. Así, el coche estará de nuevo cargado al 100% para el día siguiente.

• Es un proceso seguro

Recargar un coche eléctrico es un proceso que no tiene riesgo. Es una operación segura ya que tanto los cables como las tomas de corriente del coche y las estaciones de carga, están diseñadas para ofrecer seguridad en todas las condiciones posibles incluida lluvia. Sus componentes contienen un elevado grado de protección ante polvo y agua. Además, los conectores del cable se bloquean durante la recarga para evitar posibles robos si hemos dejado el coche cargando.

• Su precio

Las tarifas varían según diferentes factores. La primera clave es que es más barato recargar el coche en casa que en un lugar público. Principalmente porque en casa, la potencia contratad es menor y la Ley recoge que en las horas supervalle, de noche, existe una reducción considerable del consumo y precio de la luz.

Los coches eléctricos por ciudad principalmente, consumen infinitamente menos batería que combustible los de combustión. Se calcula que el coste en euros por unos 100 km de un Peugeot eléctrico es de 0,55 a 2,04 euros mientras que el de un diésel gira casi por los 5 euros. Por tanto, el ahorro es considerable.