Comienzan a rodar las primeras unidades del BMW iX5 Hydrogen

Tras cuatro años de desarrollo, el BMW iX5 Hydrogen es ya una realidad. La firma bávara inició el pasado mes de diciembre la producción a pequeña escala de este SUV movido por hidrógeno en su planta de Múnich, y es ahora cuando las primeras unidades están siendo entregadas.

Según la propia compañía, en total se producirán menos de cien unidades del iX5 Hydrogen, que serán repartidas por múltiples mercados para ser utilizadas como vehículos de demostración y prueba. Se espera, por tanto, que un buen número de ellas acaben en manos de miembros seleccionados de la prensa del motor.

Basado en el BMW X5 con motor de combustión, pero adaptado para integrar una pila de combustible de hidrógeno, el BMW iX5 Hydrogen fue presentado por vez primera en Frankfurt durante el IAA 2019. Un par de años más tarde, durante la IAA Mobility 2021 de Múnich, BMW utilizó los primeros prototipos como medio de transporte para los asistentes a este Salón del Automóvil.

Así es el nuevo iX5 Hydrogen de BMW

En lo que respecta a su tecnología, cabe destacar que aunque las pilas de combustible que integra han sido producidas por Toyota, el resto de los componentes del vehículo han sido desarrollados por BMW con el apoyo de sus socios. El motor eléctrico que integra es el mismo de quinta generación que puede encontrarse en otros modelos eléctricos de la marca y entrega una potencia de 295 kW.

Al contrario de lo que cabría esperar, el BMW iX5 Hydrogen no ofrece tracción total, ya que cuenta únicamente con un motor eléctrico en el eje trasero. Esto es así porque el espacio necesario para integrar un segundo motor eléctrico en el eje delantero está ocupado por la pila de combustible de hidrógeno.

La pila de combustible de hidrogeno es capaz de generar únicamente 125 kW de potencia, por lo que si la demanda de energía supera la que es posible generar en cada instante, el sistema recurre a la que se ha almacenado previamente en el pack de baterías de iones de litio. La carga de esta batería se puede realizar, o bien por la propia pila de combustible, o gracias a la regeneración en las deceleraciones.

El hidrógeno empleado por la pila de combustible se almacena en dos tanques capaces de soportar 700 bares de presión, fabricados en fibra de carbono reforzada con plástico (CFRP). Ambos tanques permiten almacenar de forma conjunta seis kilogramos de hidrógeno, con los que el iX5 Hydrogen de BMW es capaz de recorrer, según el fabricante, algo más de 500 km bajo el ciclo de homologación WLTP.

Por el momento, la firma bávara no ha especificado cuál podría ser el precio del iX5 Hydrogen si finalmente BMW llegase algún día a producirlo en serie, poniéndolo al alcance de cualquier cliente.