Estos consejos te ayudarán a limpiar y desinfectar tu vehículo para evitar una infección por coronavirus y la propagación de la pandemia.
Cómo desinfectar el interior de nuestro coche sin dañar a la tapicería
Después de pasar por el año 2020 y la pandemia, nos hemos acostumbrado a desinfectar el coche, algo que debemos seguir haciendo habitualmente
Después de más de un año con el coronavirus campando a sus anchas por nuestras ciudades y pueblos, parece que ya lo tenemos aprendido. Pero más vale prevenir que curar y no solo el coronavirus está presente en el aire y puede suponer un problema para la salud. Así que es importante mantener el interior del coche limpio y desinfectado siempre, y no solo a causa de esta pandemia que ya dejamos atrás.
La limpieza es fundamental y en esa limpieza hay que aprovechar y dejar todo el espacio bien desinfectado y libre de bacterias y virus que pueden jugarnos una mala pasada. Lo primero que se debe hacer es una limpieza normal. Es decir, aspirar el polvo y dejar la tapicería bien limpia. Después, se ha de pasar un paño húmedo por todas las superficies.
Es importante eliminar todas las manchas más visibles, frotando con algo más de intensidad en ese lugar. Esas manchas pueden ser orgánicas y en ellas pueden vivir bacterias que son perjudiciales para los ocupantes del vehículo si entran en contacto con la piel, la boca o los ojos. Mejor retirarlas. Si es necesario, se puede utilizar un poco de agua jabonosa para retirar todas las manchas.
Para la tapicería suele bastar pasar un trapo con agua jabonosa y luego aclarar con agua limpia y dejar secar. Si hay manchas más persistentes, hay que utilizar productos específicos que no dañen la tapicería. La limpieza del habitáculo evita, además, que haya elementos que causen alergia, como polen o polvo, que aunque parezca algo inofensivo, pueden causar situaciones de riesgo. Un estornudo en mal momento puede ser bastante peligroso.
Desinfección del habitáculo
No hay que obsesionarse con esto, pero si algo nos ha enseñado esta situación es que es importante desinfectar los elementos que tocamos con frecuencia. Se puede limpiar de manera habitual el volante, la palanca de cambio, la puerta y los mandos del aire acondicionado por ejemplo, con una toallita higiénica. De esta manera se retira el polvo y también se higieniza.
Para asegurarnos, se puede optar por otra solución. Un pulverizador con alcohol diluido en agua puede ser una buena idea. La proporción ideal es un 70% de alcohol y un 30% de agua. Para conseguir esta mezcla se debe utilizar 73 ml de alcohol de 96º, el de uso común para desinfectar heridas, y añadir 23 ml de agua. Esta mezcla se debe mezclar y llenar un pulverizador con ella.
Es conveniente pulverizar con esta solución de alcohol de forma periódica, después del uso del vehículo y cuando vaya a estar un buen rato sin uso. De esta manera actuará con eficiencia y no creará problemas de ningún tipo a los ocupantes. Antes de volver a utilizar el coche, es conveniente ventilar bien el interior, para que se disipen bien los vapores del alcohol, aunque no resultan perjudiciales.
Hay otros productos de desinfección preparados, como los pulverizadores de alcohol isopropílico, que resulta más delicado y que debe utilizarse con cuidado y con medidas de seguridad en su aplicación. No hay que obsesionarse, pero siempre ayuda tener el interior limpio y desinfectado para que ni el coronavirus ni otras bacterias nos puedan afectar.
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