Cómo las grandes empresas ofrecen descuentos en combustible

El precio de los combustibles ha sido uno de los mayores desafíos económicos para las familias españolas en los últimos años. Se suma a otros gastos del vehículo como cuando hay que realizar reparaciones, cambiar las pastillas de freno o si hay problemas con adblue. El Gobierno tomó medidas para aliviar la carga económica de los ciudadanos, ya que los combustibles son esenciales para muchas actividades cotidianas. Finalizadas estas ayudas, los consumidores han buscado maneras de reducir sus gastos a la vez que han aumentado sus conocimientos sobre el tema. La preocupación por el precio del combustible se ha convertido en una prioridad, hasta el punto de que muchas personas han cambiado sus hábitos con el único propósito de mejorar su situación financiera.

En este escenario, la mayoría de empresas del sector han puesto en marcha acciones muy definidas para ofrecer precios exclusivos y descuentos con los que fidelizar a sus clientes y captar la atención del público objetivo. La competencia es cada vez mayor entre las gasolineras, por la consolidación de los puntos ‘low cost’, así como por la capacidad de algunas empresas, siendo Repsol el caso más evidente, de potentes reducciones en el gasto en combustible condicionadas a la contratación de la luz y el gas, por ejemplo. Galp, otro de los gigantes de la industria refinera, ofrece un descuento para aquellos usuarios que utilicen la tarjeta del banco gallego Abanca, tras un acuerdo entre ambas partes.

La búsqueda de alicientes para gastar en combustible, a buen precio, también lleva a la vinculación con otro tipo de compras, dentro de la misma compañía. Ocurre con Alcampo, que ofrece descuentos en sus gasolineras cuando los clientes utilizan la tarjeta propia. Las gasolineras Shell, por su parte, están aliadas con el banco ING. Cuando el usuario paga con una tarjeta de esta entidad bancaria en dicha gasolinera, recibe un reembolso de un porcentaje del pago previamente realizado.

Aplicaciones

Las compañías han lanzado aplicaciones móviles muy sofisticadas desde las que los consumidores pueden realizar gestiones como pagos y contrataciones, así como acceder a promociones.

Repsol tiene Waylet, una de las apps más potentes del mercado español en 2024. Cada pago a través de ella genera un descuento directo en la factura del combustible o la acumulación de saldo para gastar en futuras compras. Esta app, además, ofrece ventajas en compras realizadas en otros sectores. Cepsa cuenta con su propia aplicación, que incluye promociones exclusivas y especializadas, además de la gestión de los servicios contratados con esta empresa. BP tiene una aplicación propia que, entre otras funciones, genera una tarjeta virtual con la que el usuario puede realizar su pago. Es un método seguro y moderno que gana en funcionalidad y confianza para el cliente.

El Club Disa es uno de los más potentes en España. Está asociado con las gasolineras Shell y ofrece descuentos muy suculentos. Esta compañía, por su parte, también cuenta con una app propia. Mundo Galp completa el listado de las apps más populares para ahorrar en combustible y utiliza un sistema de acumulación de puntos muy atractivo. El objetivo, para todos estos ejemplos, es ganarse la confianza del público ante un mercado tan cambiante como éste.