Diez verdades sobre la contaminación del aire que no podemos ignorar
Explora los impactos devastadores de la contaminación del aire a través de 10 hechos impactantes que revelan riesgos para la salud y la urgencia de acción global.
La contaminación del aire emerge como uno de los problemas ambientales más críticos de nuestra era, exponiendo a la población mundial a un alto riesgo de enfermedades crónicas y muertes prematuras. Creemos que el primer paso para abordar este desafío es comprender profundamente la problemática, por lo que presentamos diez datos sorprendentes sobre la contaminación del aire que destacan su gravedad y la necesidad imperativa de acciones efectivas a nivel global.
Un aire casi irrespirable
Un estudio de 2023 revela una verdad alarmante: menos del 1% del área terrestre global goza de niveles seguros de contaminación del aire. En 2019, apenas el 30% de los días registraron concentraciones diarias de PM2.5 inferiores a 15 µg/m3. Aún más impactante es que solo un 0.18% del territorio global y un insignificante 0.001% de la población mundial estuvieron expuestos a niveles de PM2.5 por debajo del umbral seguro de 5 µg/m3 anualmente. Asia Oriental y Meridional lideran las regiones con mayor polución, mientras que Australia y Nueva Zelanda, seguidos por otras áreas en Oceanía y Sudamérica, presentan las concentraciones más bajas de PM2.5, aunque han visto incrementos debido a temporadas de incendios forestales más intensas y prolongadas. Contrariamente, Europa y América del Norte han experimentado una disminución en los niveles de contaminantes, gracias a regulaciones más estrictas.
Mortalidad y enfermedad: El alto precio de un aire contaminado
La contaminación del aire se erige como uno de los principales factores de riesgo para enfermedades crónicas y muerte prematura a nivel mundial. En 2017, se estimó que fue responsable de aproximadamente 5 millones de muertes, casi el 9% de la población mundial. La exposición constante a un aire impuro incrementa el riesgo de padecer enfermedades coronarias, respiratorias, derrames cerebrales, diabetes y cáncer de pulmón. Los países del Sudeste Asiático son los más afectados por la polución exterior, representando el 15% de las muertes a nivel mundial, mientras que las naciones más ricas solo contribuyen con un 2%, evidenciando una disparidad marcada entre países desarrollados y en desarrollo.
Un enemigo más letal que el tabaco
La polución aérea reduce años de vida a billones de personas en todo el mundo. Según un informe de 2021 del Instituto de Política Energética de la Universidad de Chicago, los habitantes de India, país con los niveles más altos de contaminación del aire, pierden un promedio de 5.9 años de vida debido a la mala calidad del aire. Aunque los cinco países con peor polución se encuentran en Asia, la amenaza crece rápidamente en África Central y Occidental, donde la expectativa de vida se ha reducido de dos a cinco años, posicionando a la contaminación aérea como una amenaza mayor para la salud humana que el VIH/SIDA y la malaria.
El coste económico de un aire impuro
La contaminación del aire tiene un costo económico de casi US$3 billones, equivalente al 3.3% del PIB mundial, según un informe de 2020 de Greenpeace Sudeste Asiático y el Centro de Investigación sobre Energía y Aire Limpio. Las muertes relacionadas con la contaminación del aire suponen 1.8 mil millones de días de ausencia laboral, 4 millones de nuevos casos de asma infantil y 2 millones de nacimientos prematuros en 2018. La discapacidad resultante de enfermedades crónicas por mala calidad del aire cuesta a la economía mundial $200 mil millones, con las bajas por enfermedad y los nacimientos prematuros costando $100 mil millones y $90 mil millones respectivamente.
El lastre más pesado en los países de ingresos bajos y medios
La trágica ironía de la contaminación del aire es que sus efectos mortales golpean con mayor fuerza en las regiones menos capaces de hacerle frente. En África Subsahariana y en el Sur de Asia, las tasas de mortalidad por contaminación atmosférica son desproporcionadamente más altas que en Europa y Norteamérica, con tasas de muerte hasta 100 veces mayores. La polución del aire interior, atribuible a la quema de combustibles sólidos como madera, residuos de cultivos, carbón y keroseno en fuegos abiertos para cocinar, sigue siendo una amenaza considerable en naciones de bajos ingresos, afectando a unos 2.6 mil millones de personas globalmente.
Cambio climático: Acentuando el riesgo de incendios e incremento de la polución
Los eventos climáticos extremos y los incendios forestales, más frecuentes e intensos debido al cambio climático, elevan los riesgos de contaminación del aire derivada de estos. Las temporadas de sequía más prolongadas y la deforestación para el desarrollo agrícola intensifican la probabilidad de incendios. Estos sucesos liberan emisiones de carbono, smog y contaminantes que pueden propagarse entre países y regiones. Ejemplo de ello fueron las olas de calor sin precedentes y los incendios forestales en el oeste de EE. UU. y Canadá en julio de 2021, que provocaron que ciudades de la costa este como Nueva York quedaran envueltas en humo y aire contaminado.
Pocos países cumplen con los estándares de calidad del aire de la OMS
Solo siete países en el mundo cumplieron con los estándares de calidad del aire de la OMS en 2023. Excepciones notables incluyen a Australia, Estonia, Finlandia, Grenada, Islandia, Mauricio y Nueva Zelanda. En contraste, regiones con niveles de contaminación extremadamente peligrosos como Bangladés, Pakistán e India, superaron los límites de PM2.5 recomendados por la OMS por amplios márgenes. Esta disparidad subraya la necesidad urgente de acciones globales para combatir la contaminación del aire y proteger la salud pública.
Progresos y desafíos en la lucha contra la polución atmosférica
A pesar de ser el mayor emisor de carbono y contar con los niveles más altos de contaminación del aire, China ha logrado avances significativos en la reducción de la polución gracias a acciones políticas estrictas. En seis años, la polución por partículas se redujo en un 29%, cayendo por debajo de los niveles de 1990. Sin embargo, el 98% de las áreas urbanas en China todavía superan las directrices de la OMS, y el 53% excede los estándares nacionales menos estrictos del país. Este progreso destaca tanto los logros como los retos pendientes en el camino hacia un aire más limpio.
Directrices más estrictas, un reto global
Ninguna de las 100 ciudades más grandes del mundo logró cumplir con las directrices actualizadas de la OMS sobre la calidad del aire en 2021, evidenciando la magnitud del problema de la contaminación del aire a nivel global. La OMS ha reducido a la mitad el límite aceptable para PM2.5 y ha disminuido en un 75% el límite para dióxido de nitrógeno (NO2), retando a los países a intensificar sus esfuerzos para mejorar la calidad del aire. Según la OMS, reducir los niveles de contaminación del aire a estos nuevos límites podría prevenir casi el 80% de las muertes relacionadas con la polución del aire.
Comentarios cerrados