Escasez de combustible verde amenaza las metas climáticas de la aviación en Europa

Stefan Schulte, CEO de Fraport AG, afirmó que la producción de combustible de aviación sostenible (SAF) en la Unión Europea no es suficiente para cumplir con las cuotas impuestas. Durante una conferencia en Frankfurt el 19 de junio, Schulte señaló que el ritmo de producción no está aumentando lo suficientemente rápido. La UE, con una nueva Comisión Europea, deberá abordar este desafío para alcanzar sus objetivos de sostenibilidad en el sector aéreo.

Metas de sostenibilidad en riesgo

La Unión Europea se enfrenta a un desafío significativo en sus esfuerzos por alcanzar las cuotas de combustible de aviación sostenible (SAF) que ha impuesto para los próximos años. Stefan Schulte, CEO de Fraport AG, advirtió que la producción actual de SAF, derivado de materiales biológicos como aceites de cocina usados y astillas de madera, no está aumentando a la velocidad necesaria para cumplir con estos objetivos. Según Schulte, la capacidad de producción es insuficiente para alcanzar las metas, comenzando con un 2% del combustible total en 2025 y escalando hasta un 70% en 2050.

El principal obstáculo es el costo elevado del SAF, que puede ser de tres a cinco veces más caro que el combustible convencional para aviones. Esta disparidad de precios desincentiva la producción a gran escala, a pesar de que el SAF puede reducir las emisiones de carbono hasta en un 80% en comparación con el combustible tradicional. La demanda, sin embargo, parece estar garantizada. Willie Walsh, director de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), ha afirmado que «cada gota de SAF que se produce se utiliza y se utilizará», reflejando una fuerte necesidad en el sector.

Desafíos de producción y políticas

La falta de certeza sobre la demanda futura también complica la situación. Los productores de SAF han expresado preocupaciones sobre la posibilidad de una sobreproducción si la demanda no se materializa como se espera. Esta incertidumbre frena las inversiones necesarias para aumentar la capacidad de producción. Además, la estructura actual del mercado y las políticas de apoyo no son suficientes para fomentar un crecimiento rápido en la producción de SAF.

El reciente cambio en la Comisión Europea y el Parlamento Europeo, tras las elecciones de este mes, añade otra capa de complejidad. Se espera que los nuevos líderes europeos aborden estos desafíos con políticas más robustas y claras que proporcionen el apoyo necesario a los productores de SAF. Esto podría incluir incentivos financieros, subsidios o medidas regulatorias que hagan que la producción de SAF sea más competitiva en comparación con los combustibles fósiles.

Comparaciones y lecciones aprendidas

A nivel global, otros países y regiones están implementando políticas y estrategias que pueden servir de modelo para la UE. En particular, Noruega ha sido pionera en la adopción de combustibles sostenibles, estableciendo mandatos estrictos que exigen una mayor proporción de SAF en los vuelos domésticos. Esta política ha impulsado significativamente la demanda y la producción de SAF en el país, demostrando que las medidas regulatorias firmes pueden ser efectivas.

Por otro lado, en Asia, Singapur ha lanzado iniciativas ambiciosas para convertirse en un centro de producción y distribución de SAF en la región. A través de incentivos fiscales y apoyo gubernamental, Singapur está atrayendo inversiones significativas en la industria de combustibles sostenibles. Estas experiencias internacionales subrayan la importancia de un enfoque integral y proactivo para abordar los desafíos de la producción de SAF.

El papel de la industria

Las aerolíneas también juegan un papel fundamental en esta transición. Compañías como Lufthansa y Air France-KLM han comenzado a invertir en SAF y han firmado acuerdos a largo plazo con productores para asegurar el suministro. Estas acciones no solo demuestran el compromiso de la industria con la sostenibilidad, sino que también proporcionan la certeza de demanda que los productores necesitan para aumentar la capacidad de producción.

Sin embargo, para que estos esfuerzos sean realmente efectivos, es necesario que todas las partes involucradas trabajen juntas. Los gobiernos deben proporcionar el marco regulatorio y los incentivos necesarios, los productores deben innovar y aumentar la capacidad, y las aerolíneas deben comprometerse a utilizar SAF a pesar de los costos más altos.

Perspectivas futuras

El camino hacia una aviación más sostenible es largo y lleno de obstáculos. Sin embargo, la urgencia de reducir las emisiones de carbono en el sector aeronáutico es innegable. Los aeropuertos y las aerolíneas están en el centro de este esfuerzo, con Fraport AG, operador del aeropuerto de Frankfurt, desempeñando un papel crucial. Las declaraciones de Schulte subrayan la necesidad de una acción concertada y rápida para superar los desafíos actuales.

La transición hacia combustibles más sostenibles no solo depende de la tecnología y la producción, sino también de un marco político y económico que apoye esta transformación. La colaboración entre gobiernos, la industria y las organizaciones internacionales será clave para alcanzar los ambiciosos objetivos de sostenibilidad de la UE.