El fabricante americano Dodge toma también el camino de la eléctrificación
Nadie escapa a la actual tendencia en el mercado del automóvil. Ni siquiera una marca como Dodge reconicida por el ruido de sus motores.
Dodge, la marca responsable durante las últimas décadas de algunos de los Muscle Cars más radicales que pueden encontrarse en el mercado americano, está desarrollando según algunos medios del país el que será el vehículo más rápido de toda la historia de la compañía.
Lo realmente destacable de este modelo no es, sin embargo, el tiempo que sea capaz de marcar en el cuarto de milla, ni la cifra de potencia de su motor, o su aceleración. Y es que todo apunta a que Dodge se olvidará por vez primera de los ruidosos motores V8 o V6 y apostará por un sistema de propulsión totalmente eléctrico.
Este drástico cambio en la estrategia comercial de la compañía se enmarca en el ya iniciado por el Grupo Stellantis, del que Dodge forma parte. Según algunos analistas, al menos seis vehículos totalmente eléctricos y varios modelos híbridos enchufables podrían llegar al mercado en los próximos años de marcas anteriormente pertenecientes a la alianza FIAT-Chrysler.
El listón está bastante alto para el primer eléctrico de Dodge
El vehículo más rápido de todo el catálogo de productos de Dodge es actualmente el Challenger Demon, capaz de alcanzar las 60 millas por hora desde parado en solo 2.3 segundos. Si el nuevo modelo eléctrico de Dodge va a ser el más rápido de la historia de la compañía, parece evidente que tendrá que superar esa marca. Esto significaría acercarser bastante a las especificaciones del actual Model S Plaid de Tesla, que es capaz de parar el crono en menos de dos segundos en esta misma prueba de aceleración.
La plataforma Giorgio, desarrollada por Alfa Romeo para sus modelos Giulia y Stelvio, va a ser modificada por Maserati para ser empleada en vehículos totalmente eléctricos con una arquitectura de 800 Voltios. Stellantis tiene intención de hacer uso de esta plataforma en modelos de multiples marcas del grupo, como DS, Alfa Romeo, Maserati, Jeep, Chrysler y, por supuesto, también Dodge.
No es descartable, por tanto, que el nuevo eléctrico de Dodge emplee esta plataforma y que cuente también con una arquitectura de 800V que le daría multiples ventajas, especialmente a la hora de realizar recargas ultra-rápidas. De este modo se situaría, al menos en este apartado, a la altura de otros modelos de la competencia como el Porsche Taycan Turbo S o el Audi RS e-tron GT.
Por el momento poco más se sabe de este nuevo modelo de Dodge, pero lo que es seguro es que hará historia marcando un punto de inflexión en la trayectoria del fabricante americano.
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