Ford estudia mejoras en la autonomía mediante el uso de LEDs de colores

Los ingenieros de Ford han comprobado que es posible aumentar la autonomía de un vehículo eléctrico empleando ciertos trucos psicológicos mediante el uso de LEDs

Disfrutar de una buena autonomía en un vehículo eléctrico se puede lograr de dos formas distintas: reduciendo el consumo energético o incrementando la capacidad de las baterías. Esta segunda opción es, sin embargo, la menos eficiente y también la más costosa, ya que esto incrementa tanto el peso del vehículo como su precio de venta.

Es por este motivo que todos los fabricantes de vehículos eléctricos tratan de implementar diversas soluciones para reducir el consumo energético, con la idea de que la suma de todas ellas tendrá un efecto notable en la autonomía.

Esto sería precisamente lo que justifica, por ejemplo, la sustitución de los retrovisores externos por un sistema con cámaras -para mejorar así el coeficiente aerodinámico del vehículo-, el uso de llantas aero, o el uso de asientos calefactados cuando sea posible, en lugar de la climatización.

Los ingenieros de Ford en Europa quieren ir un paso más allá, y están experimentando algunos trucos psicológicos que permitirían a los ocupantes del vehículo sentirse a gusto, reduciendo al mismo tiempo el uso del aire acondicionado o la calefacción.

Ford está realizando estas pruebas con un prototipo de la furgoneta Transit Smart Energy de 10 plazas. Algo que no es casual, ya que cuanto mayor es el espacio interior de un vehículo, mayor es el consumo energético del climatizador para mantener una temperatura interior agradable.

El rojo me da calor y el azul frío

La idea sobre la que trabajan estos ingenieros es que el uso de LEDs en color rojo da una mayor sensación de calor; mientras que si son azules la sensación es la contraria. Para comprobar si esto es cierto, han simulado un día de invierno a cero grados centígrados, y otro de verano a 30 grados. Una vez hecho esto, a los pasajeros de la furgoneta se les ha preguntado por su nivel de confort, variando el color de la iluminación interior y la temperatura del climatizador, y se han recogido los resultados.

Por increíble que parezca, los ingenieros de Ford han llegado a la conclusión de que el uso de estos LEDs de colores en el interior permite reducir el consumo energético en un 3.3 por ciento cuando se quiere enfriar el habitáculo, y en un 2.5 por ciento cuando lo que se pretende es calentarlo. Unos porcentajes que pueden no parecer mucho, pero como decíamos anteriormente, todo suma.

Para hacernos una idea de lo que esto supone, el simple uso de la iluminación interior del vehículo permitiría recorrer unos 11 km más en invierno a un vehículo con 400 km de autonomía, manteniendo el mismo nivel de confort de los pasajeros.

Además de estos LEDs Ford ya planea otras medidas para minimizar el consumo energético

Este sistema de LEDs de colores se complementará con otra serie de medidas, como la climatización individualizada para cada pasajero en función de sus necesidades, y la desactivación de ésta en aquellas plazas sin ocupantes.

Ford ya utilizó esta misma furgoneta el año pasado para probar un nuevo sistema de calefacción con bomba de calor que aprovecha el que proviene de los motores. Esto permite reducir el consumo del climatizador hasta en un 65 por ciento y la autonomía en hasta un 20 por ciento.

Otras medidas que estudian los ingenieros de Ford incluyen la posibilidad de abrir solo hasta la mitad la puerta corredera de la furgoneta, para mantener así mejor la temperatura interior del habitáculo.