El gobierno anuncia un nuevo etiquetado ambiental de la DGT desde 2021

No por ser esperado que el gobierno haya anunciado una revisión y pertinente nuevo etiquetado ambiental de la DGT da la razón a tal abanico de agentes implicados tanto desde dentro de la industria del automóvil como fuera que clamaban una profunda evaluación del sistema en aras de hacer más realista la dispensación de pegatinas.

Como pasó con el paso de los test de homologación en ciclo NEDC al WLTP, que sumían a unas pruebas en condiciones más realistas a los coches que luego debían venderse con unas cotas en cuanto a consumo y emisiones que, en el uso en circunstancias ajenas a laboratorio poco o nada tenían que ver con las que los fabricantes hacían constar alegremente en sus fichas técnicas, la adopción de sistemas eléctrificados que permitían homologar coches que superaban con las tasas máximas ‘lógicas’ pero sobre todo las legales clama al cielo.

Sea como fuere, en paralelo al anuncio del Plan Integral para el Impulso de la Cadena de Valor de la Industria de la Automoción que contempla, además de subvenciones y ayudas a la compra de coches de nuevo cuño, tanto con motores tradicionales pero eficientes y también o, en paralelo, las ayudas a la compra de coches eléctricos al Plan MOVES II, el gobierno hizo público su intención de promover para 2021 un nuevo etiquetado ambiental de la DGT.

4 años después de anunciarse e implantarse este sistema de discriminación visual de los vehículos a motor según su configuración mecánica en aras de la distinción entre vehículos dentro de una movilidad más eficiente, sostenible y respetuosa que otros, ha buscado y encontrado salvoconductos amparándose en el avance tecnológico para sumarse a la exigencia normativa permitiendo

Sin que se haya concretado aún la hoja de ruta, parece que, entre las novedades que podría mostrarse desde el nuevo etiquetado de la DGT aparecería una nueva etiqueta, la de la pegatina D, correspondiente a nuevas mecánicas diésel y gasolina más eficientes aún que las C que corresponden a los coches que cumplían en 2016 con la normativa Euro 4 ó 6 según el combustible utilizado por sus motores.

El fin de las etiquetas CERO en vehículos con motores de combustión

La rumorología apunta a que, entre los grandes damnificados podrían estar los vehículos que se han sumado a la electrificación mediante los sistemas de hibridación ligeral o mild hybrid que podría dejar de ser considerados con la etiqueta ECO.

Igualmente, los vehículos que actualmente disponen de la pegatina azul por ser considerados como CERO en cuanto a emisiones son aquellos que, en modo eléctrico, superar los 40 kilómetros de autonomía pero ¿qué ocurre cuando circulan en exclusiva con su motor de combustión por entornos como las zonas de bajas emisiones de urbes como Madrid o Barcelona que han implementado sus políticas contra los coches que no sean ECO en adelante?

Este tipo de ventajas podrían quedar relegadas, mediante el nuevo etiquetado de la DGT para con los vehículos CERO a aquellos eléctricos 100 por 100 y no para híbridos con autonomías eléctricas reducidas.