Llamada a revisión del Toyota bZ4X porque las ruedas pueden salirse

Con menos de 3 mil unidades en circulación tras su reciente lanzamiento al mercado, el fabricante japonés se ha visto obligado a llamar a revisión su primer modelo totalmente eléctrico disponible globalmente. En un comunicado publicado en las últimas horas, Toyota explica que sus ingenieros han detectado un fallo en el buje de las ruedas del bZ4X que puede provocar que con repetidos giros y frenazos las tuercas que sujetan las ruedas lleguen a aflojarse.

La compañía explica que si esto se produce y se continua circulando, es posible que se generen ruidos anormales en el vehículo, y alerta de que en el peor de las casos es incluso posible perder una rueda. Con el peligro que ello supone para la seguridad de los ocupantes del vehículo y todos aquellos que lo rodean.

Se trata, por tanto, de un asunto bastante grave y por este motivo Toyota ha recomendado a todos los propietarios de su nuevo SUV eléctrico que dejen inmediatamente de utilizar el vehículo. Afortunadamente no se ha reportado por el momento ningún accidente producido por este motivo. Algo a lo que, sin duda, habrá contribuido el reducido número de unidades del bZ4X ya en circulación.

Actualmente, hay unas 2.700 unidades del bZ4X en circulación. Unas 2.200 en Europa, 280 en Norteamérica, 110 en Japón y 60 en el resto de Asia.

¿Y qué pasa con el Subaru Solterra?

Por el momento se desconoce si este problema afecta también al Subaru Solterra. Pero teniendo en cuenta que es prácticamente el mismo vehículo pero con otra marca, no sería extraño que así fuera. Subaru no se ha pronunciado todavía al respecto, pero es de esperar que lo haga en breve, confirmando o no si su SUV eléctrico sufre también este problema.

ACTUALIZACIÓN: Los últimos reportes indican que, como era de esperar, el Subaru Solterra sufre también este mismo problema y el fabricante japonés ha llamado también a revisión todas las unidades actualmente en circulación.

El bZ4X es, como decimos, el primer vehículo de Toyota desarrollado desde sus inicios para ser eléctrico y comercializado a nivel global. El fabricante japonés ya había puesto a la venta anteriormente algún modelo eléctrico, como el RAV4 EV o una versión del C-HR, pero únicamente en mercados muy concretos.

Toyota ha sido reacia durante estos últimos años a comercializar vehículos totalmente eléctricos apoyados por una batería de gran capacidad y ha mantenido su apoyo a la tecnología híbrida para el presente, y a la de pila de combustible de hidrógeno para el futuro. La realidad del mercado ha obligado, sin embargo, a la compañía a poner a la venta su primer vehículo eléctrico puro. Un primer paso que ha llegado tarde y, como vemos ahora, con un notable tropiezo.