Aunque Barcelona ha realizado una gran inversión en autobuses eléctricos, la falta de infraestructura de carga no permite su uso.
Madrid amplía la línea de autobuses eléctricos preferentes
La línea de autobuses eléctricos preferentes de Madrid amplia su recorrido para llegar hasta Valdebebas y mejorar el trayecto inicial
La ciudad de Madrid cuenta desde hace unos meses con una línea de autobuses eléctricos que funciona como si fuera un tranvía. Es decir, no se integra con el resto del tráfico, sino que circula por una vía segregada y tiene preferencia en los semáforos. Lleva funcionando ya unos meses, como hemos comentado, pero ya se ha incrementado su recorrido para facilitar los desplazamientos de los usuarios.
Esta línea estaba prevista para funcionar desde la zona de Valdebebas hasta el Hospital Ramón y Cajal, con un recorrido total, incluyendo ida y vuelta, de 31 kilómetros. Sin embargo, en la primera fase no llegaba hasta Valdebebas y es ahora cuando se incluyen los últimos seis kilómetros que permiten a los usuarios partir desde Valdebebas o llegar hasta allí.
La ampliación de la línea permite que los usuarios puedan comprar los billetes y pagar los abonos en las máquinas expendedoras que se ubican en las 19 paradas del recorrido. En 13 de estas paradas se han instalado paneles de mensajes variables, para mejorar la comunicación con los usuarios. Los autobuses eléctricos que ofrecen este servicio circulan por un carril segregado del resto del tráfico a lo largo de 19 kilómetros, aunque el resto del trayecto lo realizan por la calzada principal.
Además, utilizan un sistema de prioridad de semáforos, gracias al cual siempre encuentran las luces verdes para poder circular sin detenerse apenas. Con esto, el trayecto desde los dos puntos de la línea es de unos 40 minutos, lo que agiliza la comunicación entre los vecinos de Valdebebas hasta el hospital Ramón y Cajal.
Cuando los sensores del cruce con semáforos detectan al autobús, se activa un protocolo que gestiona los distintos semáforos para permitir el paso libre del bus, ajustando las distintas fases del semáforo. Cuando pasa el bus, se vuelve a la regulación estándar, para gestionar el tráfico de manera normal.
Doce autobuses en servicio
Por el momento, la línea está gestionada por diez autobuses eléctricos, aunque se espera que a finales de año sean 12 los que presten servicio, con lo que se agilizará el trayecto. Estos autobuses eléctricos tienen una longitud de 12 metros y tienen un diseño muy minimalista, en el que predominan zonas acristaladas que permiten una visión muy agradable desde dentro.
Comentarios cerrados