Nissan y Mitsubishi presentan conjuntamente su nuevo eléctrico urbano

Nissan y Mitsubishi han unido sus fuerzas en el desarrollo de un nuevo vehículo eléctrico urbano, destinado exclusivamente al mercado japonés, que ahora acaba de ver la luz. Ambos fabricantes emplearán, sin embargo, un nombre distinto para su comercialización, aunque se trata básicamente del mismo vehículo. Así, mientras el modelo de Nissan se llamará Sakura, Mitsubishi ha optado por una denominación algo más difícil de recordar: eK X EV.

Este nuevo modelo equipa un motor eléctrico de 47 kW de potencia y 195 Nm de par. El pack de baterías cuenta además con una de las capacidades más reducidas que pueden encontrarse en un vehículo totalmente eléctrico; solo 20 kWh, que son sin embargo suficentes para recorrer hasta 180 km con una sola carga.

Como vemos, por autonomía no es el vehículo adecuado para realizar largos viajes y su área de actividad se limitará fundamentalmente a las abarrotadas calles de las pobladas ciudades japonesas. No obstante, sí será posible realizar alguna escapada de corta distancia por autopista sin ningún problema, ya que su velocidad máxima está limitada a 130 km/h.

En lo que respecta a la carga de la batería, Nissan y Mitsubishi aseguran que en un wallbox con corriente alterna es posible completar una carga en alrededor de ocho horas. Mientras que si esta operación se realiza en un punto de carga rápido en corriente continua, para alcanzar el 80 por ciento se necesitarán unos 40 minutos. El vehículo soporta además carga inversa V2H Vehicle-To-Home.

En verano llegará a Japón con un precio más que accesible

El Sakura será el primer vehículo eléctrico de estas características disponible en el catálogo de Nissan para el mercado japonés. Su puesta a la venta está prevista para este mismo verano, con un precio que arrancará en los 1.78 millones de yenes (unos 13.200 euros), impuestos incluidos y con la ayuda del gobierno a la compra de vehículos Cero Emisiones ya aplicada.

Este tipo de vehículos compactos y urbanos, denominados Kei-cars, son tremendamente populares en Japón, con una cuota de mercado allí cercana al cuarenta por ciento. Para que un vehículo pueda formar parte de esta categoría, su longitud no puede superar los 3.4 metros, siendo su anchura máxima 1.48 metros, y pudiendo llegar a los dos metros de alto. Al contrario de lo que algunos piensan, el motivo por el que estos vehículos son tan populares en Japón no se debe exclusivamente a la facilidad para aparcar, sino que está más relacionado con el sistema impositivo del país, que aplica una tasa mayor en función de la longitud del vehículo.