El Opel Manta ha resucitado con un motor completamente eléctrico

El Opel Manta ha resucitado y se ha convertido en un modelo completamente eléctrico. Ahora, la marca lo ha denominado Opel Manta GSe Elektromod, equipa un motor capaz de desarrollar 150 CV de potencia y está ligado a una caja de cambios manual de cuatro velocidades. Como seguro que sabes, el Opel Manta A era uno de los coupés deportivos más notorios de los años setenta y ahora la marca le ha querido rendir un especial homenaje.

El Opel Manta GSe Elektromod ha nacido para mostrar el «compromiso de la marca con la movilidad libre de emisiones para un futuro sostenible muy deseable», ha confirmado Michael Lohscheller, CEO de la marca. El original motor de cuatro cilindros de gasolina se ha cambiado por un motor completamente eléctrico que ofrece una potencia de 150 CV y 254 Nm de par motor máximo. Esto no solo lo hace en el Opel Manta más potente sino también en el coche eléctrico más poderoso de la marca, hasta el momento.

Opel Manta GSe Elektromod

El modelo cuenta con un paquete de baterías de 31 kWh que es más pequeño que el monta el Opel Corsa-e y el Opel Mokka-e. Ofrece una autonomía completamente eléctrica de 200 km y se puede recargar mediante la frenada regenerativa aunque se puede cargar completamente en cuatro horas gracias al cargador de 9.0 kW que incorpora el modelo.

Es importante destacar que el nuevo Opel Manta sigue siendo de tracción trasera y esa potencia se entrega al eje trasero a través de una caja de cambios manual, a diferencia de cualquier eléctrico que se puede encontrar actualmente en el mercado. Los conductores pueden «cambiar manualmente de marcha o directamente engranar la cuarta y conducir de forma automática».

El Opel Manta aunque se ha actualizado notablemente, hace un guiño al modelo original. Cabe hacer una mención especial a la parrilla Vizor que incorpora una pantalla LED que muestra varios mensajes y motivos, mientras que los faros convencionales, las luces de freno y las luces de circulación diurna se han cambiado por elementos LED más nítidos.

La llamativa pintura de color amarillo neón coincide con el nuevo diseño de Opel y contrasta con un capó negro al estilo de la década de 1970. Las llantas de aleación Ronal de 17 pulgadas reemplazan las llantas originales de 13 pulgadas, y los paragolpes cromados se han eliminado para replicar el aspecto de los Manta mejorados por compañías de preparación como Irmscher.

El interior se apoya en gran medida en la actualidad, los relojes analógicos han dado paso a una pantalla digital y una pantalla táctil de 10 pulgadas, mientras que se han instalado asientos deportivos desarrollados originalmente para el Opel Adam S. Las señales retro, sin embargo, se extienden a un volante de tres radios, una palanca de cambios y un freno de mano manual.