El Porsche Mission R adelanta el futuro de la competición eléctrica

Las competiciones automovilísticas están virando hacia la movilidad eléctrica. Cada vez hay más categorías que cuentan con coches eléctricos, pensados para obtener el mejor resultado con la tecnología aplicada a la competición. Porsche es consciente de esto y por eso acaba de presentar el Mission R, un coche pensado para las carreras de clientes.

El modelo conceptual tiene varios elementos que lo convierten en un gran coche de carreras y no solo hablamos del tren de tracción eléctrico que lo mueve. Estéticamente cuenta con una imagen muy deportiva y dinámica. Pero además está fabricado con fibra de lino, un material renovable para cuya fabricación se utiliza un 85% menos de CO2 que la fibra de carbono. Ofrece la misma resistencia, pero resulta menos lesivo para el medio ambiente.

Seguridad y funcionalidad

La seguridad del piloto es importante y la jaula de seguridad del coche es parte de esos elementos protectores. En el caso del Porsche Mission R esta no es de acero soldado a la carrocería, sino que es de plástico reforzado con fibra de carbono y está integrada directamente en el techo.

Este elemento ha sido diseñado para ofrecer seguridad al piloto y además, aportar una sensación de espacio en el interior, haciendo que sea más agradable la conducción. La aerodinámica viene mejorada por diversos elementos que mejoran el flujo del aire alrededor del coche. Las llantas ayudan a esto, ya que tienen un tamaño de 18 pulgadas y están diseñadas para mejorar la aerodinámica.

El chasis también se ha pensado para obtener el máximo rendimiento del coche. Delante utiliza una suspensión de doble horquilla, mientras que en el eje trasero se ha contado con uno tipo McPherson. Esta suspensión permite contar con un sistema independiente que mejora su comportamiento en pista.

El sistema de frenos combina eléctricos y mecánicos, lo que permite un frenado eficiente y rápido. La dirección también es eléctrica y funciona haciendo que cada motor reciba información acerca del giro y transmita potencia a la rueda adecuada para completar el giro.

Motores eléctricos

El Porsche Mission R cuenta con dos motores que han sido diseñados para obtener buenos resultados en la carrera. La potencia máxima que ofrecen se cifra en 800 kW, que equivalen a 1 088 CV. Esto lo ofrece en el modo calificación, así que permite unos resultados más que adecuados para mover el coche de 1 500 kg por la pista de manera muy eficiente.

La potencia se mantiene constante en 320 kW, equivalentes a 435 CV gracias al motor del eje delantero, en el modo carrera. La aceleración de 0 a 100 km/h es de 2,5 segundos. El diseño de los motores, los inversores controlados por impulsos (PCI) y la transmisión son idénticos en los ejes delanteros y traseros, algo que es importante para reducir los costes de los clientes.

Las baterías ofrecen una capacidad de 82 kWh y se ha diseñado para ofrecer una autonomía en una carrera al esprint de 25 a 40 minutos. Con un sistema de carga de 900 voltios, superior a los 800 voltios que utiliza el Porsche Taycan, puede recuperar la carga en solo 15 minutos. La potencia máxima de carga es de 350 kW, así que hay una buena capacidad para estar listo en poco tiempo.

Al ser un vehículo pensado para competición, el personal de boxes accede a la información de manera rápida, con una conexión inalámbrica. Así pueden monitorizar el comportamiento de todos los elementos electrificados y solucionar con rapidez cualquier problema. Además, un sistema de luces LED en el parabrisas muestra el estado del coche y avisa si se puede acercar cualquier técnico o solo los especializados en alta tensión.