El primer concesionario Polestar abierto no está ni en Suecia ni en China

La marca sueca, perteneciente al consorcio chino, ha elegido a Oslo como ciudad donde situar el primer concesionario Polestar

Suecia es el país de origen de Polestar, el que fuera, en principio, el departamento de Volvo especializado en preparaciones de alto rendimiento y desarrollo de competición.

China es, a nivel mundial, el país donde mayor número de automóviles que recurren y dependen por completo del uso y almacenamiento de electricidad para su funcionamiento.

A pesar de que la fórmula más lógica hubiera podido situar en Suecia o en China el primer concesionario Polestar, la marca independiente que centra su producción de coches en vehículos híbridos o eléctricos de alta gama, ha saltado la frontera entre los países escandinavos para ubicar en Noruega su primera delegación comercial.

En la ciudad de Oslo, capital del país nórdico, Polestar abrirá mañana 25 de octubre el primero de los puntos de exposición y venta de su nueva andadura independiente de Volvo. Como tal, propone una experiencia novedosa.

De entrada, el edificio tito en Øvre Slottsgate, 7; fue levantado a comienzos del siglo pasado, con la base de unos cimientos sólidos, Polestar ha querido trasladar esa firmeza al carácter de su concesionario.

Al igual que sus dos modelos, el coupé híbrido Polestar 1 y la berlina eléctrica Polestar 2, que están a punto de empezar a ser comercializados, el aspecto minimalista pero cuidado hasta el más mínimo detalle concuerda con el de, sobre todo, el interior de sus coches. Vehículos elegantes, sobrios, con un toque de frialdad característica de estos lares, pero, a la vez, acogedores en su fondo.

La experiencia interactiva en el concesionario Polestar

Gracias a la disposición de los especialistas de la marca, tanto los interesados en adquirir uno de estos vehículos, como las personas que ya hayan formalizado su pedido, como todo aquel que quiera vivir la experiencia en el Polestar Space de Oslo, podrá conocer, de primera mano, todos los detalles de lo que el constructor que toma a la estrella polar como imagen de marca.

Desde esta delegación también se podrán formalizar los test de conducción, previos a la compra, y la elección entre la recogida en el concesionario del coche reservado o su envío al domicilio de su propietario.

Y este es solo el comienzo de la aventura comercial de la marca ya que, según apuesta la marca, cada Polestar Space integrado en la red comercial se transformará, a la vez, en un espacio comunitario para el uso y disfrute ya que, además de actividades relacionadas con la marca, se llevarán a cabo charlas y exposiciones, desde diseño y arquitectura hasta tecnología y, por supuesto, automoción.