Prueba Hyundai Kona EV: ¿Puede un eléctrico ser nuestro coche de diario?
Hemos hecho la prueba del Hyundai Kona EV y hemos planteado algunas incógnitas para conocer si realmente un eléctrico puede cumplir con todas las funciones de un coche de diario
La electrificación ya es un hecho, y es que los vehículos eléctricos cada vez son más avanzados y tienen la capacidad de convertirse alternativas razonables. La prueba que os traemos hoy tiene como protagonista a una de las alternativas más interesantes del segmento, y es que estamos hablando del Hyundai Kona EV.
Su carta de presentación es muy interesante, y es que cuenta con una buena habitabilidad, un diseño atractivo, 204 caballos de potencia y una autonomía superior a 400 kilómetros. En Driving Eco, ya hemos podido probar el Hyundai Kona EV y, sin duda, nos ha dejado un buen sabor de boca.
Sin embargo, hoy no vamos a hacer una prueba al uso, puesto que si quieres, puedes leer la prueba a fondo del Hyundai Kona EV de nuestros compañeros de Top10motor. Nosotros nos vamos a centrar en una serie de incógnitas que nos hacemos a la hora de plantearnos la principal: ¿Es posible tener el Hyundai Kona EV como coche de diario?
Las dudas a la hora de comprar un coche eléctrico en la actualidad son numerosas, y es que pese a que hay mucha información acerca de este tipo de coches, no suelen despejar nuestras preguntas acerca de si podemos comprar un coche eléctrico para hacer nuestra vida cotidiana.
Por ello, nos hemos planteado una serie de dudas y hemos analizado el primer eléctrico de Hyundai para saber si realmente es un coche válido para todos los días o, sin embargo, echaremos en falta una mayor practicidad. Vamos a ello:
¿Qué tal se comporta?
El comportamiento del Hyundai Kona EV es uno de los puntos fuertes del coche, y es que una vez que hemos tenido un corto periodo de adaptación, podemos incluso divertirnos al volante. Mencionamos lo del periodo de adaptación puesto que para conducir un eléctrico debemos re-ordenar nuestra cabeza y olvidarnos de nuestras experiencias de conducción anteriores.
El Hyundai Kona EV muestra una entrega de potencia muy instantánea y lineal, por lo que la sensación es de que siempre vamos a tener potencia bajo el pie derecho. Por ello, debemos tener un mayor tacto al gestionar el acelerador, puesto que los 395 Nm de par transmitidos al tren delantero hacen que esta potencia se atragante en ciertas situaciones, por lo que puede que el coche “morree” en caso de que nos pasemos en la salida de una curva.
Las baterías se han instalado en una posición centrada y baja, por lo que el centro de gravedad está justo donde debería estar. Esto permite que el eléctrico coreano tenga una gran estabilidad, aunque sentimos lo mismo que en la prueba del Mercedes-Benz EQC, y es que este tipo de coches dan muy poca información al conductor.
A pesar de esto, el Hyundai Kona EV ha demostrado tener un gran comportamiento y potencia más que suficiente para afrontar cualquier tipo de situación. Si hay que poner alguna pega en este aspecto, es que la suspensión nos ha parecido demasiado rígida, por lo que debemos aumentar las precauciones a la hora de pisar un bache o cruzar un badén.
¿Su autonomía es suficiente?
Una de las características más interesantes del Hyundai Kona EV es que las celdas de sus baterías están compuestas por iones de litio con electrolito sólido. Puede que esto os suene a chino, pero se traduce en que con cargar las baterías del coche al 80%, ya disponemos de casi 400 de los 456 kilómetros oficiales de autonomía que declara el fabricante según el ciclo WLTP.
Además, después de probar el Hyundai Kona EV, podemos decir que estas cifras son bastante reales. Dependiendo del uso que le demos, podemos incluso llegar a aumentarla, y es que es difícil ver bajar los kilómetros cuando estamos circulando por ciudad. Sin embargo, como es propio en los coches eléctricos, donde más batería consume es en autopista, por lo que son los tramos a alta velocidad lo que más penaliza su autonomía.
¿Es muy difícil acostumbrarse a él?
Como hemos dicho antes, conducir un vehículo eléctrico nos exige un periodo de adaptación, puesto que su manejo tiene muchas diferencias respecto a la de un vehículo con motor de combustión.
En el Hyundai Kona EV encontramos unas levas tras el volante que nada tienen que ver con las que encontramos en los coches automáticos convencionales. En este coche, sirven para administrar los tres niveles de la regeneración de sus baterías, algo que nosotros sentimos como si fuera el freno motor. Por lo tanto, si pulsamos la leva izquierda disminuimos la retención y si lo hacemos con la derecha, esta aumenta hasta el punto de que podremos practicar la conducción con un solo pedal.
Cuatro modos de conducción:
Además, el Hyundai Kona EV cuenta con tres modos de conducción visibles y uno oculto: Comfort, Sport, Eco y Eco+. Os contamos su funcionamiento:
- El modo Comfort es el que el coche tiene predeterminado. Este equilibra la respuesta del motor con la eficiencia energética, por lo que el sistema de frenado regenerativo queda configurado en el nivel 1.
- En el modo Sport, tenemos una respuesta más instantánea tanto en el acelerador como en el volante. En caso de activar este modo, el nivel de regeneración se mantiene en el primer nivel.
- El modo Eco está pesando para optimizar la autonomía, por lo que el sistema de climatización se pone en modo Eco y el sistema de frenada regenerativa aumenta al nivel 2.
- El programa ECO+ es el oculto, y decimos eso porque se activa cuando mantenemos pulsado unos segundos el botón de los programas de conducción. Hyundai ha creado este programa para aquellos momentos en los que vayamos apurados de autonomía, por lo que el sistema de climatización se apaga, la frenada regenerativa se queda en el nivel 2 y el coche no permite superar los 90 km/h.
¿Se puede hacer un viaje con él?
Esta es una de las grandes incógnitas a la hora de comprar un coche eléctrico, y es que pocos son los que se atreven a tener sólo un coche cero emisiones en el garaje. Afrontar un viaje con este tipo de coches es todavía una quimera.
Sin embargo, gracias a modelos como el Hyundai Kona EV y sus 456 kilómetros de autonomía, hacer un viaje de media distancia es posible. Por lo tanto, el eléctrico coreano nos permite, por ejemplo, hacer un viaje de Madrid a Valencia sin tener que preocuparnos de si hay estaciones de carga por el camino.
En caso de que el viaje sea de mayor distancia, tendremos que utilizar alguna de las páginas especializadas en organizar itinerarios para los viajes en eléctricos para saber cuáles son los puntos donde podremos para a recargar el coche. La pregunta es, ¿Se alargará mucho nuestro viaje si tenemos que cargar el coche por el camino? No te anticipes, esa es nuestra siguiente pregunta.
¿Perderé mucho tiempo cargándolo?
Si hablamos de los tiempos de recarga, la palabra clave es “depende”. La respuesta a esta pregunta varía en función de la fuente de alimentación a la que lo conectemos. El Hyundai Kona EV cuenta con un conector de carga CCS de tipo 2.
La primera opción, y sin duda la menos recomendable, es conectarlo a una toma de corriente doméstica. En nuestro caso lo probamos y el Hyundai Kona EV recibía 2,1 kW. Con este flujo energético, se consiguen cargar unos 100 kilómetros de autonomía por cada 8 horas de recarga.
Por lo tanto, es más que recomendable instalar un Wallbox en casa o en el trabajo. Dependiendo del elegido, la potencia de carga oscila entre los 3 kW y los 7 kW, por lo que las baterías se cargan al completo en 9 horas si escogemos el primero y unas cuatro horas si el elegido es el segundo.
Además, una de las grandes bazas del Hyundai Kona EV es que cuenta con el conector CCS2 compatible con puntos de recarga rápida. En caso de conectar el coche a uno de estos, las baterías tardan media hora en recargarse del 0 al 80%. No es demasiado recomendable abusar de este tipo de recargas, puesto que acortan la vida útil de las baterías, pero sí que pueden ser ideales por si estamos en medio de un viaje y justo encontramos una estación con súper-cargadores.
¿Es muy difícil encontrar una estación de recarga?
Este problema ya es ajeno al Hyundai Kona EV, y es que pese a que este modelo demuestra que ya es factible tener un eléctrico en el garaje, la infraestructura disponible en nuestro país no da la talla.
En nuestro caso, hicimos varias excursiones a centros comerciales de la periferia madrileña donde el propio sistema de navegación del Hyundai Kona EV nos indicaba la existencia de puntos de recarga. Efectivamente estaban en el lugar indicado, pero algo muy diferente es que realmente funcionaran.
En uno de los centros comerciales visitados, había cuatro estaciones de carga de las cuáles sólo funcionaba correctamente una. Como es normal en un emplazamiento como este, el tránsito de personas es enorme, por lo que se convirtió en tarea imposible lograr enchufar nuestro Hyundai Kona EV, y es que la estación siempre estaba ocupada.
Por ello, tendremos que esperar para ver cómo evoluciona este punto imprescindible para la implantación definitiva de los vehículos eléctricos. Sin duda, iniciativas como Ionity harán posible que querer cargar el coche fuera de casa no se convierta en una tarea frustrante.
¿Puede ser un coche para toda la familia?
El Hyundai Kona fue desarrollado desde cero pensando en que habría una versión eléctrica. De esta manera, la marca coreana ha conseguido lo que parece un imposible en los EVs, y es que no ha perdido prácticamente habitabilidad respecto a las variantes con motores térmicos.
Por lo tanto, tenemos un coche de 4,18 metros de largo, 1,8 metros de ancho y 1,57 metros de ancho en el que se pueden acoplar dos sillitas de bebé sin ningún problema. Además, hay espacio suficiente para que puedan viajar dos pasajeros cómodamente e incluso tres en caso de que sea necesario.
Su maletero cuenta con una capacidad de 332 litros, por lo que tenemos la misma capacidad que en un Kia Stonic, aunque algo menos que en modelos como el Skoda Kamiq (400 litros) o el Jeep Renegade (351 litros).
¿Cuánto cuesta el Hyundai Kona EV?
La unidad que hemos probado contaba con el nivel de equipamiento Style, que es el más alto de la gama con perdón del Style 2C. Los dos cuentan con el mismo equipamiento de serie pero en el segundo se puede configurar la carrocería en dos tonos pagando 450 euros adicionales.
El precio del Hyundai Kona EV es, sin duda alguna, su principal inconveniente, y es que en caso de asociarlo al acabado Style, parte de unos intimidantes 46.300 euros. Es un precio sin duda elevado, pero también tenemos que decir que su equipamiento de serie es muy completo.
Contamos con elementos como los faros Full Led, cargador de móvil inalámbrico, sistema de infoentretenimiento con pantalla táctil de 7,2 pulgadas, sistema de sonido Krell con 8 altavoces, cámara de aparcamiento o Head Up Display.
Conclusión: ¿Puede el Hyundai Kona EV ser un coche de diario?
Después de haberos resuelto estas preguntas, la respuesta definitiva queda en vosotros. En nuestra opinión, el Hyundai Kona EV es un coche que puede satisfacer todas las necesidades que necesita el usuario medio: puede ser un coche familiar, tiene una autonomía suficiente como para poder irnos de vacaciones con él, es sencillo de cargar y además es divertido de conducir.
Sin embargo, hay dos grandes inconvenientes: uno es el precio del Hyundai Kona EV, y es que 46.300 euros son 15.000 más de lo que cuesta la versión tope de gama (Style) con el motor 1.6 CRDI 4×4 de 136 caballos.
El segundo no es problema del coche, sino más bien de las instituciones públicas, y es que deben comenzar a fomentar seriamente el desarrollo de una mejor infraestructura para hacer posible un aumento en las matriculaciones de vehículos eléctricos.
Comentarios cerrados