Renault Twizy Oakley Design, una variante (casi) de competición
El Renault Twizy llegó hace unos años, en forma de una variante especial F1 y ahora se presenta una variante basada en esta desde Oakley Design
Un Renault Twizy es solución muy práctica para moverse por la ciudad con un vehículo eléctrico. Es una propuesta de la marca francesa que llegó en 2012 y que fue un pionero en este tipo de vehículos. Hoy hay otros cuadriciclos en el mercado, pero el Twizy sigue siendo uno de los más conocidos. Oakley Design, una empresa de transformación de vehículos, ha creado una versión de este modelo eléctrico urbano basado en una serie promocional del mismo.
El Renault Twizy Oakley Design está basado en el Twizy RS F1, una versión que creó la marca francesa en el momento del lanzamiento para dar más publicidad al modelo. A partir de ese vehículo, inspirado en la Fórmula 1, el personalizador le ha dado una imagen espectacular a un vehículo muy sencillo pero muy práctico.
Una imagen muy especial para el Twizy
El Twizy ha sido equipado con varios elementos fabricados con fibra de carbono, que refuerzan su imagen y lo convierten en algo distinto. Los retrovisores de hecho, pertenecen a un Fórmula 1 de 2015. Las llantas pertenecen a un coche de Fórmula 2 y están fabricadas con magnesio, un material muy ligero que además le aporta un toque especial. Los neumáticos son más anchos de lo normal y destacan en el aspecto exterior.
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RENAULT TWIZY OAKLEY DESIGN
La imagen se completa con un difusor trasero en el que se ha instalado una luz como la que utilizan los coches de Fórmula 1. El techo es de policarbonato y se han añadido elementos de fibra de carbono en la carrocería. El volante tiene recubrimiento de Alcántara, un toque de lujo que hace que el interior también sorprenda bastante.
El chasis se ha reforzado con acero y la suspensión se ha modificado para acercarlo más al suelo, al estilo de los vehículos que quiere imitar. Pero todo el carácter deportivo de esta variante acaba aquí, porque se ha utilizado el mismo motor de 17 CV que usa el modelo regular. Además, la batería de 6,1 kWh solo le permite una autonomía de 90 kilómetros con cada carga. Suficiente, en todo caso, para su uso en ciudad.
Este es un vehículo de capricho, porque se trata de una edición especial que solo consta de 5 unidades. Su precio no ha trascendido, ya que se subasta y este puede variar. Además, el propietario ha de contar con un pago de 45 euros al mes por el alquiler de la batería, aunque con esta modalidad, claro, se olvida uno de los problemas y cuando es necesario, la marca la cambia.
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