Renting de vehículos eléctricos: una manera asequible de conducir un coche sostenible
El renting de coches eléctricos permite disfrutar de un coche eléctrico a un precio muy inferior al de la compra y con todos los gastos incluidos en la cuota.
Muchos usuarios quieren acercarse a la movilidad eléctrica, pero hay varios motivos para no hacerlo. Uno de ellos es el precio de los coches eléctricos, que supera bastante a vehículos similares con motor de combustión. Pero si ese es el motivo, hay una posibilidad de contar con uno de estos vehículos sostenibles a un precio muy asequible y para todos los usuarios. El renting se está convirtiendo en un manera sencilla y práctica para poder acceder al uso de coches eléctricos y hay una gran variedad de vehículos de renting para disfrutar.
El renting es un contrato de uso, por el que la empresa propietaria del coche ofrece el uso de un coche al usuario a cambio de una cuota que puede tener una periodicidad mensual o con cualquier otro plazo que se estipule por contrato. En la cuota, se incluyen todos los complementos que se necesitan para tener activo el vehículo. Desde el seguro hasta el mantenimiento y en algunos casos, el cambio de neumáticos.
Todo esto, claro, depende de las condiciones del contrato de renting, así que hay que buscar la oferta que más se ajuste a las necesidades de cada uno. La mayoría de las empresas de renting tienen ofertas que pueden cubrir todos los puntos necesarios y agruparlos en una única cuota mensual.
Con esto, el usuario solo se ha preocupar de mantener la batería cargada y lista para su uso. Todo lo demás, está incluido en el contrato de renting y se puede contar con un coche eléctrico a un precio muy inferior del que se tendría que pagar por la compra. Además todos los demás gastos de uso habitual se incluyen en la cuota y no hay que preocuparse de nada.
Por ejemplo, comprar un ZS EV Long Range con acabado Luxury supone un desembolso de 40.490 euros. A eso hay que sumarle las operaciones de mantenimiento habituales, el seguro y otros complementos. Este modelo cuenta con una batería de 72 kWh, que permite una autonomía de 440 kilómetros. Lo mueve un motor de 115 kW, que equivalen a 156 CV y un par máximo de 280 Nm.
En el caso de contratar un renting de este modelo a través de ARVAL hay que tener en cuenta que se incluye todo lo que hemos comentado antes, y que no incluye el IVA. Si quien contrata el renting es un autónomo o una empresa, puede desgravar el impuesto y resulta una buena inversión, que permite disfrutar del vehículo a un coste menor y además, ahorrar en impuestos.
Este es solo un ejemplo, ya que hay muchos modelos eléctricos disponibles para disfrutar de uso a través del renting. El KIA e-Niro, con una batería 64,8 kWh, que le permite contar con una autonomía de 643 kilómetros con su motor de 150 kW. Estos modelos y otros pueden ser una buena opción para comenzar a conducir un coche eléctrico sin necesidad de comprarlo y disfrutando de todas las ventajas que ofrece el renting.
Además, con la evolución que están experimentando este tipo de vehículos, optar por la fórmula del renting en vez de la compra en propiedad tiene una ventaja adicional: al finalizar el contrato de renting siempre puedes cambiar el vehículo por otro más actual.
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