El sistema de asistencia a la conducción BlueCruise de Ford se retrasa a principios de 2022

BlueCruise, el nuevo sistema de asistencia a la conducción que Ford publicita como el primero que realmente permitirá la conducción sin manos, no estará finalmente disponible antes de acabar el año, tal y como estaba previsto. El fabricante americano acaba de anunciar que ha decidido retrasar su lanzamiento al primer trimestre de 2022, con el fin de poder mejorar su funcionamiento antes de ponerlo a disposición de sus clientes.

En declaraciones a los medios norteamericanos, Jim Farley, el Director Ejecutivo de la compañía, ha asegurado que la intención de Ford con esta decisión es la de simplicar la tecnología que emplea BlueCruise. Aunque no ha dado detalles más concretos sobre las modificaciones que pretenden realizar.

En la dirección de la compañía parecen muy optimistas respecto al impacto que tendrá este nuevo sistema de asistencia a la conducción a la hora de aportar mayor valor a sus vehículos. Según sus estimaciones, el 80 por ciento de las unidades vendidas del Mustang Mach-E vendrán equipadas con BlueCruise en el futuro. Este sistema viene de serie en todas las versiones a excepción de la de entrada a la gama.

BlueCruise estará disponible en varios modelos eléctricos de Ford

La nueva Ford F-150 Lightning, cuyo éxito ha superado las previsiones de la compañía, podrá equipar también este sistema de asistencia a la conducción. No obstante, la compañía estima que el porcentaje de unidades de esta pickup eléctrica que integrarán BlueCruise respecto al total de las ventas será mucho menor que en el caso del Mustang Mach-E. Alrededor del 15 por ciento. Una posible explicación a este hecho es que este tipo de vehículos suelen utilizarse en entornos labolares, en los que se busca reducir costes optando por las versiones más básicas en cuanto a equipamiento.

Según la propia Ford, BlueCruise será el primer asistente a la conducción que permitirá la conducción sin manos de verdad en algunas de las principales autopistas y carreteras de Estados Unidos. En cualquier caso y para que nadie se confunda, debemos recordar que se trata de un sistema de asistencia a la conducción de nivel 2 y, por tanto, requerirá como cualquier otro que el conductor preste en todo momento atención a la carretera; con independencia de que lleve o no las manos en el volante.

Los sistemas de asistencia a la conducción de Nivel 3 son los que permitirán al conductor distraerse, ya que el vehículo deberá ser capaz de avisar de cualquier posible incidencia con el tiempo suficiente para que el conductor pueda retomar el control del vehículo tras abandonar cualquier otra actividad que esté realizando.

En cualquier caso, para que este tipo de sistemas de asistencia a la conducción sean una realidad, parece que tendremos que esperar aún unos cuantos años.