Tesla deja de aceptar el Bitcoin por motivos medioambientales

En algo menos de dos meses, el fabricante americano parece haber entrado finalmente en razón y ha dado marcha atrás en sus planes iniciales de aceptar el Bitcoin -y quizás en un futuro otras criptomonedas- como método de pago a la hora comprar uno de sus vehículos.

Fue a finales del pasado mes de marzo cuando Tesla anunció que sus clientes en Estados Unidos podían abonar los 100 dólares en concepto de depósito necesarios para formalizar una reserva en su equivalente en Bitcoins. Posteriormente, la cantidad total a pagar antes de realizar la entrega del vehículo se abonaría también en esta popular criptomoneda.

Tesla anunció además en aquel momento que estaba trabajando en extender los pagos en Bitcoins a otros mercados, además del americano.

Donde dije digo, digo Diego

49 días después de aquel anunció, Tesla ha decidido ahora dejar de aceptar el Bitcoin como método de pago, justificando esta decisión en su actual preocupación por el incremento en el consumo de combustibles fósiles que está provocando el minado de Bitcoins. Así lo ha anunciado el propio Elon Musk, que ha añadido además que tampoco venderán por el momento ni un solo Bitcoin de los mil quinientos millones de dólares que invirtieron a principios de año.

Tesla asegura que volverá a aceptar el Bitcoin una vez haya constatado que el minado de esta criptomoneda se realiza con energías renovables. La compañía está también estudiando la posibilidad de aceptar otras criptomonedas que requieran un consumo de energía mucho menor. Concretamente, menos del uno por ciento del que requiere el Bitcoin.

Las criptomonedas son una buena idea en muchas áreas y creemos que tienen un futuro prometedor, pero esto no puede ser a costa del medioambiente, ha concluido el Director Ejecutivo de Tesla.

Lo cierto es que, aunque la decisión de Tesla es la correcta y más vale rectificar tarde que nunca, resulta sorprendente que en una de las firmas americanas en la que trabajan algunos de los ingenieros más brillantes, nadie se diese cuenta de esto mismo que están diciendo ahora antes de anunciar a finales de marzo su respaldo al Bitcoin.

El lado oscuro del Bitcoin que todos ya conocíamos

Aquí mismo, en DrivingEco, ya avisamos entonces de que la apuesta por la movilidad eléctrica y sostenible no parece muy compatible con el uso de un sistema de pagos, que si destaca por algo, es precisamente por ser extraordinariamente ineficiente, al requerir un consumo de energía desorbitado.

No solo eso, como también indicamos entonces, buena parte del minado de criptomonedas se está realizando en China, donde se ha disparado el consumo de carbón y gas natural precisamente por este motivo. A todo esto, hay que añadir además la actual crisis mundial por la escasez de semiconductores que está afectando especialmente a los fabricantes de automóviles, muchos de los cuales han tenido incluso que detener la producción temporalmente, y de la que el minado de criptomonedas es también en parte responsable.

En definitiva, que como decimos, más vale tarde que nunca. Pero la razón que esgrime ahora Tesla para dejar de aceptar el Bitcoin era algo perfectamente conocido cuando comenzaron a respaldarlo. No es nada nuevo.