Tesla inhabilitará la carga rápida de todos sus vehículos siniestrados
La firma americana quiere así desincentivar aún más la restauración de vehículos siniestrados, ya que considera que no son seguros
Recuperar y restaurar vehículos de Tesla que han sido declarados «siniestro total» tras un grave accidente se ha convertido ya en algo habitual, especialmente en Estados Unidos. Rich Rebuilds es un popular canal de YouTube en el que se muestran algunas de las reparaciones necesarias para «devolver a la vida» algunos de estos vehículos siniestrados.
La popularidad de este canal, ha permitido incluso la creación de algunos negocios que se dedican a almacenar piezas de Teslas siniestrados, que venden posteriormente para la reparación de otros Teslas en la misma situación.
Tesla ha desaconsejado siempre este tipo de prácticas, ya que considera que suponen un grave riesgo para la seguridad de los ocupantes de cualquiera de estos vehículos restaurados. Y aunque no lo dicen, también para la propia imagen de la marca, ya que si se produce por ejemplo el incendio de uno de estos vehículos porque las baterías estaban dañadas, es el nombre de Tesla el que ocupará todas las portadas de los medios.
Es por este motivo que la firma americana ha tratado siempre de desincentivar este tipo de prácticas, dificultando la obtención de piezas de repuesto de forma directa, o dejando de ofrecer actualizaciones de software a los vehículos siniestrados. Unas medidas que no parecen ser, sin embargo, suficientes y que han llevado a Tesla subir un poco más el listón.
Recuperar uno de estos vehículos siniestrados va a ser todavía más complicado
En un comunicado para sus empleados, Tesla asegura haber modificado su política en relación a los vehículos que ya no cuentan con soporte. De tal modo que, a partir de ahora, todos los vehículos que sufran un grave siniestro y no puedan ser reparados por los medios oficiales perderán la capacidad de realizar recargas rápidas, tanto en los Supercargadores de la propia Tesla, como en los de terceros.
Tesla va a seguir ofreciendo, sin embargo, la posibilidad de realizar una inspección de seguridad en cualquiera de estos vehículos para comprobar si los componentes de alto voltaje que integra son seguros. Aunque en caso de serlo, eso no será suficiente para impedir la inhabilitación de la capacidad de realizar cargas rápidas en corriente continua.
En el mismo comunicando, Tesla asegura además que a partir de ahora se reserva el derecho de desactivar la carga rápida de cualquier vehículo que considere que no es seguro. Y podrá incluso tomar acciones legales contra aquellos que traten de saltarse esta restricción.
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