¿Coche o robot? Así es TIGER, lo último del Grupo Kia-Hyundai

Se llama TIGER, por las siglas en inglés de Transforming Intelligent Ground Excursion Robot. En castellano, algo así como Robot Inteligente y transformable para recorridos sobre el terreno. O sea, que es un robot. Pero también un vehículo de cuatro ruedas…

El caso es que este interesante proyecto de New Horizons Studio, perteneciente al Grupo Kia-Hyundai, que se está llevando a cabo junto a Autodesk y Sundberg-Ferar, propone un concepto de vehículo-robot (y así todos contentos) que permitiría transportar todo tipo de cargas por terrenos de difícil acceso. Seguro que, como yo, ya estás pensando en la Luna… Y es que pinta de coche lunar tiene. Ya hemos visto otros antes, como el Audi lunar quattro. Pero el TIGER tiene algo que le hace especial.

Propulsión eléctrica, tracción total y autónomo

Como vehículo de cuatro ruedas, el TIGER está basado en una arquitectura de plataforma modular. Su sistema de propulsión utiliza un motor eléctrico, que transmite la potencia al terreno a través de cuatro ruedas mediante brazos articulados extensibles, que se asemejan a las patas de un robot. Tiene control direccional 360 grados y sensores de todo tipo para funcionar de forma completamente autónoma, sin necesidad de conductor.

Una de sus aplicaciones, por ejemplo, sería utilizar el compartimento de carga habilitado en su interior para trasladar material de ayuda en situaciones de emergencia. El TIGER podría llegar a la zona de actuación mediante un vehículo aéreo, y enfrentarse a cualquier dificultad del terreno combinando su modo de propulsión “rodante”, con tracción a las cuatro ruedas, con las ventajas que otorgan las “patas móviles”, al estilo de las del concept-car Elevate, que le permite atravesar zonas en las que cualquier otro vehículo convencional se quedaría atascado.

De momento, este es el TIGER X-1, lo que nos da idea de que habrá más evoluciones. Lo cierto es que un coche con patas robóticas como este tiene mucho sentido en el campo de los vehículos de movilidad avanzada UMV, por su capacidad para prestar asistencia en zonas de catástrofes naturales. O incluso en las grandes ciudades, donde una aplicación podría ser facilitar el acceso a personas que utilizan sillas de ruedas, al poder nivelarse al acercase a una acera y no depender de que exista una rampa.