Tráilers electrificados: la solución para un transporte pesado más eficiente

Uno de los grandes problemas que tiene el transporte pesado por carretera es el excesivo consumo de las cabezas tractoras. Se está intentado hacer que se realice una transición hacia la movilidad eléctrica, pero la complejidades de este tipo de vehículos hace que sea más difícil que en el caso de los turismos y furgonetas de pequeño tamaño.

Pero aún así, se siguen ofreciendo propuestas para conseguir que esta transición vaya haciéndose poco a poco y se convierta en una realidad. Una de esas propuestas es la creación de remolques electrificados, que permiten ayudar en la tracción, con lo que se reduce el consumo y las emisiones contaminantes.

Un remolque electrificado para ayudar en la tracción

El RA-01 mide 16 metros y ha sido fabricado por Range. Utiliza una batería de 200 kWh y con la energía que se almacena en ella se alimenta un tren de tracción eléctrico de 800 voltios, situado en el eje trasero. Este ofrece una potencia de 350 kW, equivalentes a 469 CV a las ruedas traseras, así que tiene tracción propia e independiente a la cabeza tractora.

Con esa electricidad también se gestiona el funcionamiento del portón trasero y una rampa para acceder al anterior. Es una manera interesante de reducir emisiones y consumo, ya que puede funcionar con cualquier tipo de cabina tractora.

Funciona gracias a un pivote inteligente. Este capta las aceleraciones y las frenadas de la cabeza tractora y gestiona el empuje para ayudar al motor de combustión o eléctrico de la misma con su empuje o ayudando a frenar. En este caso, el remolque activa una frenada regenerativa, así que ayuda a recargar la batería con este sistema, que ya es bastante común en los vehículos eléctricos.

El ahorro que se consigue es considerable y se asemeja a conducir la cabeza tractora sin el remolque. La prueba se realizó en un recorrido de 41 kilómetros, tanto en carretera como en tramos urbanos y con varias paradas y arranque. La velocidad máxima fue de 96,5 km/h, con tramos en que se utilizó una velocidad uniforme.

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Se prevé que el rendimiento de la batería será de unos 322 kilómetros, lo que representa una mejora del 40% en el consumo y emisiones. En el caso de tramos urbanos, la mejora respecto a hacerlo sin este sistema asciende al 48%, una cifra bastante interesante.

Otra ventaja es que el tráiler puede moverse de forma independiente sin necesidad de cabeza tractora. Se trata del sistema «carrito de la compra«, con el que lo puede mover una persona utilizando el empuje de los motores eléctricos del tráiler.

Cuando se agote la batería, se espera que sume un 10% más de rendimento, gracias al freno regenerativo. La batería puede cargarse en 10 horas y 30 minutos con una conexión estándar, pero si se utiliza un cargador de 350 kW, se puede conseguir la carga total en 45 minutos.