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La última suscripción de Mercedes-Benz para el EQE no llegará a Europa
El fabricante alemán sugiere que algunas complicaciones legales no le permiten cobrar una cuota anual para liberar mayor potencia del motor
La estrategia de Mercedes-Benz de llevar al extremo el modelo de suscripción en sus nuevos eléctricos de la familia EQ está generando bastante polémica desde hace ya algún tiempo. Tener que pagar una cuota anual por una característica que tu coche ya tiene y que simplemente es desbloqueada por software, no parece ser del agrado de algunos clientes o potenciales compradores de alguno de los más recientes eléctricos del fabricante alemán.
Mercedes-Benz ya recibió algunas críticas durante el verano de 2021, cuando anunció la primera de sus suscripciones para el EQS. Se trataba en este caso del pago de una cuota anual de cerca de 500 euros que hace posible incrementar hasta los 10 grados el ángulo de giro de la dirección del eje trasero, cuando en origen son 4.5 grados. El descontento de algunos clientes se acrecentó, además, cuando se supo que esta misma característica vendría de serie en el mercado norteamericano sin necesidad de pagar ni un céntimo.
La polémica con las suscripciones de Mercedes-Benz no acabó ahí, sin embargo. Hace menos de un mes, el fabricante alemán anunció una nueva suscripción, en este caso para el mercado norteamericano. El coste anual de esta nueva suscripción era de 1.200 dólares, una cuota con la que algunas versiones concretas del EQE y EQS de las variantes berlina y SUV verían incrementada de forma considerable su potencia y aceleración en carretera.
Sin aumento de potencia en Europa
El fabricante alemán no hizo referencia en aquel momento a la posible disponibilidad de esta misma suscripción en el mercado europeo, pero ahora sabemos que los clientes de la marca en el viejo continente en principio se tendrán que conformar con lo que hay.
Al contrario de lo que alguno puede estar pensando, el motivo de que esto vaya a ser así no es porque Mercedes-Benz haya decidido renunciar a obtener unos ingresos extras. Preguntado sobre este asunto, unas recientes declaraciones de un representante de la compañía a los medios sugieren que en Europa podría haber ciertas complicaciones legales que estarían impidiendo cobrar una cuota anual por eliminar algunas limitaciones del motor del vehículo para que ofrezca un mayor rendimiento.
Mercedes-Benz podría, obviamente, ofrecer de serie en Europa la potencia y aceleración máxima que son capaces de alcanzar estos vehículos. Pero entonces serían los clientes norteamericanos los que se quejarían por tener que pagar por algo que en Europa viene de serie, y se repetiría de nuevo la historia.
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