Volvo contará con una nueva planta de vehículos eléctricos en Eslovaquia

El fabricante sueco acaba de anunciar su intención de levantar una nueva planta en Eslovaquia, dedicada en exclusiva a la producción de vehículos eléctricos. Está previsto que su construcción se inicie este próximo año, con el objetivo de que los primeros vehículos comiencen a salir de la línea de producción de la planta en 2026. La compañía afirma que su capacidad máxima de producción ascenderá a 250 mil vehículos al año.

Para llevar a cabo este proyecto, Volvo invertirá alrededor de 1.200 millones de euros, de los que aproximadamente un 20 por ciento podrían provenir de subsidios gubernamentales. El hecho de que la planta haya sido diseñada para ser neutral en carbono, ayudará sin lugar a dudas a obtener esta financiación adicional por parte de las autoridades eslovacas.

Por el momento, el fabricante sueco no ha desvelado qué modelos serán producidos en la nueva planta eslovaca. Algo que, por otro lado, resulta bastante lógico si consideramos que de allí podrían salir modelos de los que todavía no se ha presentando ni siquiera un primer prototipo.

Eslovaquia se lleva el premio gordo

En cualquier caso, la compañía sí ha explicado que la localización elegida para la construcción de esta nueva planta, se justifica por el gran número de proveedores de componentes automovilísticos establecidos en esa zona. La nueva planta que Volvo construirá en la localidad eslovaca de Kosice, será además la primera de la compañía que se levante en territorio europeo desde hace varias décadas.

Actualmente, la sede principal y los departamente de desarrollo, marketing y administración de Volvo se encuentran en Gotemburgo. En esta misma localidad sueca, la compañía dispone también de una planta de producción; a la que hay que sumar otra planta en Ghent (Bélgica). Ya fuera de Europa, Volvo dispone de una planta de producción en Estados Unidos y tres más en China.

Según explican desde Volvo, la nueva planta de producción situada en Eslovaquia permitirá a la compañía ganar protagonismo, en un contexto en el que la demanda de vehículos totalmente eléctricos no deja de crecer. El fabricante sueco planea comercializar exclusivamente vehículos con este sistema de propulsión a partir del año 2030, y ser además completamente neutral en carbono a partir de 2040.